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Mi primer relato

Esta es mi primera vez escribiendo algo así, o al menos haciéndolas públicas. Llevo rato pensando en algunas fantasías que me encantaría poder realizar, pero mientras tanto las puedo escribir y leer sugerencias. Me llamo Ben, o al menos así me voy a llamar aquí. Tengo 25 años, soy un tipo normal, vivo solo, bastante delgado, más desde que empecé a usar bicicleta para ir al trabajo. No soy muy musculoso, pero dicen que mis piernas son bastante gruesas y que mi culo es bastante redondo. Mi piel es blanca, y me quemo muy fácilmente, así que uso mucho suéteres, más por el frio de la ciudad. Siempre ando con jeans o sudadera. Mi cabello es castaño oscuro, y cuando lo dejo crecer se pone rizado. Trabajo como cajero en una tienda de tecnología, y cuando estoy libre salgo con mi novia, Susan o juego algún videojuego en el teléfono.

Susan, de 26 años, es mi novia. Llevamos dos años juntos, y aunque a veces peleamos por tonterías, nos llevamos muy bien. Es un poco más bajita que yo, con un cuerpo muy sexy: tiene pechos pequeños pero que se ven increíbles en cualquier blusa, y un culo grande que resalta por su cintura. Su piel es como “café con leche”, no morena clásica, sino una mezcla entre blanca y un poco quemada por el sol. Su cabello negro, entre liso y rizado, es una onda perfecta que le cae hasta los hombros. Susan trabaja en una tienda de ropa, se la pasa en el gimnasio levantando pesas o haciendo sentadillas, y siempre está llena de energía. En la calle, más de una vez le han tirado piropos o han intentado algo más, y aunque me pongo celoso, en el fondo me gusta que todos la miren.

Los fines de semana, cuando los dos tenemos libre, nos escapamos en nuestras bicis. Nos encanta hacer trayectos largos, salir de la ciudad y andar hasta los pueblos cercanos, parando en algún café o almorzando en el camino. Hablamos de todo: del trabajo, de películas, de qué haríamos si ganáramos la lotería. Esos momentos me hacen sentir que lo nuestro es perfecto.

Cuando estamos juntos, el sexo es increíble, nos entendemos, nos reímos, y siempre acabamos abrazados. Aunque existe bastante confianza, aún mantengo algo en secreto, ya que, algo que me guardo porque no se cómo reaccionaria (es medio tradicional con las relaciones), el caso es que cuando estoy solo me gusta vestirme de chica, aunque un poco amateur y con la ropa que consigo o tomo “prestada” de Susan cuando la deja en mi casa. Desde hace años, lo he hecho, me maquillo y me miro al espejo y creo otra identidad, a la cual me gusta llamar Brigitte, aunque nunca he salido vestida en público, si me he tomado algunas fotos y tengo perfiles en apps como Grindr para hablar con otras chicas que les guste lo mismo o con algunos manes que me escriben. También por este gusto por transformarme y el porno conocí los captions y las historias sobre sissy's, sissyficacion, cuckolding y algo que también me generó un nuevo fetiche, el porno interracial. Es el tipo de porno que más veo y el cual más me gusta fantasear, en especial los que incluyen los temas de sissy y BBC, y por igual me gustan dónde la novia o pareja participa en la feminización y con los toros negros. Los relatos eróticos donde la novia convierte al novio en una mujer o está tiene sexo con un bbc también son algunos de las cosas que más me gusta. Todo esto me creo la fantasía de no solo probar una algún día, sino que me muero por ver a Susan con una, gimiendo por la diferencias de tamaño y sus embestidas salvajes.

Agregando a esto, una noche, después de unas cervezas, Susan y yo nos pusimos a hablar de cosas subidas de tono. Entre risas, me dijo que a veces piensa en cómo sería probar una verga grande, como las de los vídeos porno, algo “intenso”. No dijo nada de razas ni tamaños exactos, pero mi cabeza se fue directo a una BBC, y aunque no dije nada, me puse a mil. Susan no está metida en ese mundo como yo; dice que casi no ve porno y que le gusta más el sexo con conexión, como dije es más tradicional, cree en las relaciones de a dos, y eso me hace dudar si alguna vez le contaré lo que siento.

¿Cómo le digo que me visto de mujer y a veces considero ser una sissy, que sueño con un tipo negro que nos haga suyas?

Por ahora al menos mantengo el secreto, y me mantengo discreta con mis gustos y “pasatiempos”, aunque cuánto puedo mantener algo así.

Nuestra foto juntas, tal vez subamos más.
Mi primer relato

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