fuimos de fin de semana con la familia a un lugar cálido, todos íbamos vestidos con ropa ligera; yo llevaba un vestido con vuelo, muy delgado y un poco transparente, obvio ropa interior delgada y pequeña. Como íbamos varios, a alguien le tocaba ir en las piernas de otro, pues me senté en las piernas del hijo de mi marido que el no vino por trabajo, como sugirió una de mis hermanas. Quise aprovechar el momento y me senté sobre él, pero no como normalmente se hace –de lado- sino que le di la espalda para estar como si lo estuviera montando enseñándole mis nalgas; yo creo que el pobre no supo ni qué hacer, pero aprovechando el movimiento del coche, me movía muy rico sobre su paquete, que estaba cada vez más duro. Cuando llegamos, tardó un poco en bajarse del coche, jeejeje…pobre.
En la comida, obviamente no pasó nada, pero al regreso me senté sobre él pero ahora de lado, esta vez sentí cómo discretamente me acariciaba las nalgas, aprovechando la oscuridad de la camioneta y que mis nalgas hacia la puerta de la camioneta. Por el camino decidieron quedarse unos primos, por lo cual hubo más espacio,. Como ya era tarde y estábamos cansados, todos fuimos durmiendo y yo me recosté contra él y como yo me había cubierto con una frazada para el frio, el metió su mano por debajo de la manta y la puso en mi pierna. De pronto sentí que me acariciaba con la punta de sus dedos y que me iba recogiendo la falda, hasta descubrirlas por completo de manera que mi tanga estaba al alcance de su mano. Después de unos minutos comenzó a acariciarme, se acerco a mi conchita, yo estaba muy excitada; separe mis piernas para que pudiera tocarla y así lo hizo, fue rozando mi conchita por encima de mi tanga que ya debía estar muy mojada.
Y tomándose confianza corrió mi tanga y empezó a mover su dedo sobre mi rajita y yo me mojaba cada vez más, llego un momento que desee que me cogiera, de sentir su verga dentro de mí. Después de un rato dejó de acariciarme, cuando yo junte mis piernas por qué sentí que no podía aguantar más sin empezar a gemir. Me ti mi mano por debajo de su pantalón y supongo que se vino, porque sentí cómo su verga se sentía mojada…mmmmm, ojalá se hubiera venido dentro de mí!
Nos dejaron en casa y como estábamos muy cansados nos fuimos directo a la cama. Yo no paraba de pensar en lo que había sucedido y moría de ganas de que me cogiera el hijo de mi esposo Me quité la ropa, me puse un camisón cortito y me acosté. En la madrugada, en sueños sentí algo detrás de mí, algo duro en mis nalgas, un rico paquete bien duro; qué rico!! Pero no era un sueño, cuando desperté me di cuenta que era el Estaba frotando su verga en mis nalgas!! “ qué haces??!!”; “Terminar lo que iniciamos en el coche”, me dijo excitadísimo, “Qué? De qué hablas?”; “Ya sabes…hasta me abriste tus piernas”; él me sostenía con fuerza y seguía trabajando su verga contra mis nalgas, en el fondo yo la quería dentro.
“Estuve acordándome de lo rico que te di dedo en el coche, y no podía dormir “No, , soy la esposa de tu padre le dije “Tu me pusiste las facilidades para que acariciara tu conchita??!! Le respondí…No me di cuenta de nada”; “No te hagas,, estás igual de caliente que yo”, me tocó la conchita, “seguro te masturbaste hace rato, en ese momento me la metió de una gracias a mi lubricación; yo estaba prácticamente boca abajo, con el camisón subido hasta la cintura y el detrás metiéndomela; “Ah, qué ganas de cogerte”, “Desde que te escuche cómo gemías cuando te cogía nuestro vecino, cuando mi papá no estaba…no parado de desearte”; “Qué? No!”; “ No, espera!”, él seguía cogiéndome, metiéndome toda su verga en mi conchita y cada vez más duro, me bajó los tirantes del camisón y me agarró las tetas; Yo estaba súper caliente, lo deseaba mucho, pero no podía decírselo. “; “Mira cómo estás de buena…mira qué tetas… que culo tan rico tienes y como lo mueves, no necesitas negar que tú quieres que te coja, eso lo vi en tu rostro cuando veníamos de regreso del paseo”, y aceleró sus embestidas y eso me calentó; “ me hace sentir un placer maravilloso y espero que llegues pronto a disfrutar tu orgasmo por que se que pronto me voy a venir… Y no pude frenar más mi excitación y empecé a gemir y pronto alcance mi orgasmo. El se dio cuenta y me dijo…me voy a venir, yo ya alcance mi orgasmo…”. Y lo escuche decir……aaaaaahhhhhh…ummmmmm…me vengooooooo”, y en ese momento sentí cómo me inundaba su semen;

Después de ese día acepte que lo deseaba y me gustaba demasiado el sexo, la razón era que su padre durante muchos años no me prestó atención y yo era muy caliente, Por eso acepte coger con otros hombres que si me hacían sentir mujer. Últimamente resolvió pedirme que cogiera con otros hombres mientras él me observa escondido, me dice que esto le genera una excitación enorme y cuando el hombre que me ha cogido se va el me viene a buscarme y cogemos de maravilla.
En la comida, obviamente no pasó nada, pero al regreso me senté sobre él pero ahora de lado, esta vez sentí cómo discretamente me acariciaba las nalgas, aprovechando la oscuridad de la camioneta y que mis nalgas hacia la puerta de la camioneta. Por el camino decidieron quedarse unos primos, por lo cual hubo más espacio,. Como ya era tarde y estábamos cansados, todos fuimos durmiendo y yo me recosté contra él y como yo me había cubierto con una frazada para el frio, el metió su mano por debajo de la manta y la puso en mi pierna. De pronto sentí que me acariciaba con la punta de sus dedos y que me iba recogiendo la falda, hasta descubrirlas por completo de manera que mi tanga estaba al alcance de su mano. Después de unos minutos comenzó a acariciarme, se acerco a mi conchita, yo estaba muy excitada; separe mis piernas para que pudiera tocarla y así lo hizo, fue rozando mi conchita por encima de mi tanga que ya debía estar muy mojada.
Y tomándose confianza corrió mi tanga y empezó a mover su dedo sobre mi rajita y yo me mojaba cada vez más, llego un momento que desee que me cogiera, de sentir su verga dentro de mí. Después de un rato dejó de acariciarme, cuando yo junte mis piernas por qué sentí que no podía aguantar más sin empezar a gemir. Me ti mi mano por debajo de su pantalón y supongo que se vino, porque sentí cómo su verga se sentía mojada…mmmmm, ojalá se hubiera venido dentro de mí!
Nos dejaron en casa y como estábamos muy cansados nos fuimos directo a la cama. Yo no paraba de pensar en lo que había sucedido y moría de ganas de que me cogiera el hijo de mi esposo Me quité la ropa, me puse un camisón cortito y me acosté. En la madrugada, en sueños sentí algo detrás de mí, algo duro en mis nalgas, un rico paquete bien duro; qué rico!! Pero no era un sueño, cuando desperté me di cuenta que era el Estaba frotando su verga en mis nalgas!! “ qué haces??!!”; “Terminar lo que iniciamos en el coche”, me dijo excitadísimo, “Qué? De qué hablas?”; “Ya sabes…hasta me abriste tus piernas”; él me sostenía con fuerza y seguía trabajando su verga contra mis nalgas, en el fondo yo la quería dentro.
“Estuve acordándome de lo rico que te di dedo en el coche, y no podía dormir “No, , soy la esposa de tu padre le dije “Tu me pusiste las facilidades para que acariciara tu conchita??!! Le respondí…No me di cuenta de nada”; “No te hagas,, estás igual de caliente que yo”, me tocó la conchita, “seguro te masturbaste hace rato, en ese momento me la metió de una gracias a mi lubricación; yo estaba prácticamente boca abajo, con el camisón subido hasta la cintura y el detrás metiéndomela; “Ah, qué ganas de cogerte”, “Desde que te escuche cómo gemías cuando te cogía nuestro vecino, cuando mi papá no estaba…no parado de desearte”; “Qué? No!”; “ No, espera!”, él seguía cogiéndome, metiéndome toda su verga en mi conchita y cada vez más duro, me bajó los tirantes del camisón y me agarró las tetas; Yo estaba súper caliente, lo deseaba mucho, pero no podía decírselo. “; “Mira cómo estás de buena…mira qué tetas… que culo tan rico tienes y como lo mueves, no necesitas negar que tú quieres que te coja, eso lo vi en tu rostro cuando veníamos de regreso del paseo”, y aceleró sus embestidas y eso me calentó; “ me hace sentir un placer maravilloso y espero que llegues pronto a disfrutar tu orgasmo por que se que pronto me voy a venir… Y no pude frenar más mi excitación y empecé a gemir y pronto alcance mi orgasmo. El se dio cuenta y me dijo…me voy a venir, yo ya alcance mi orgasmo…”. Y lo escuche decir……aaaaaahhhhhh…ummmmmm…me vengooooooo”, y en ese momento sentí cómo me inundaba su semen;

Después de ese día acepte que lo deseaba y me gustaba demasiado el sexo, la razón era que su padre durante muchos años no me prestó atención y yo era muy caliente, Por eso acepte coger con otros hombres que si me hacían sentir mujer. Últimamente resolvió pedirme que cogiera con otros hombres mientras él me observa escondido, me dice que esto le genera una excitación enorme y cuando el hombre que me ha cogido se va el me viene a buscarme y cogemos de maravilla.
4 comentarios - con el hijo de mi marido