A la iglesia del pueblo llegó un sacerdote de mediana edad, buen mozo, mirada penetrante, y una mirada llena de paz, con una dulce sonrisa que atrae demasiado. En síntesis, si no fuera sacerdote, estaría para tener varias y extensas aventuras.
No me voy a describir, pero solo voy a decir que soy objeto de deseo de cada uno de los habitantes de este pueblo, hombres y mujeres. A eso hay que sumarle que soy sexualmente muy activa y caliente.
El único problema de estar aburrida y frustrada tanto en la vida social como sexual, es que se me ocurren ideas perversas y morbosas.
Por eso, decidí llevar al extremo la paciencia y el celibato de este nuevo pastor de la iglesia. Quiero ver hasta dónde es capaz de resistir el erotismo y lo explícito de mis aventuras sexuales.
Es domingo ,voy a la iglesia a confesarme de algunos pecados de esta semana…Y me preguntó, ¿podré contarle todo? Me escuchará, hasta donde querrá saber, despertaré su morbo, se calentará a través de mis relatos, o solo sentirá compasión? Podré ser explícita, aceptará detalles? ¿Los querrá escuchar?
Ya llego, son las 11 de la mañana, mí esposo se fue al bar, cómo cada domingo, a juntarse con amigos, a comer y beber, y a hacer gala de sus logros en los negocios y con su mujer, o sea, yo.
La iglesia por la hora está semivacía, y el confesionario sin fieles, adentro espera el, mí objetivo, tanto para que calme mí culpa, tanto para llevar a cabo mí morboso juego.
Buenos días padre,
Buenos días hija!
Fue el saludo de rigor.
Qué te trae por aquí, me preguntó con voz dulce y tranquila.
La culpa, padre, le respondí, mucha culpa por haber pecado.
Porque tienes tanta culpa, que te pasa? Cual fue tu pecado?
Ay padre, si yo cuento lo que me pasa, no sale de acá, no?
Claro hija, hay secreto de confesión, solo Dios y nosotros sabremos de que se trata.
Eso me deja tranquila, mí pecado es haber caído en la tentación y le fui infiel a mí esposo. Eso me llena de culpa.
Mmmmm, es un pecado grave, que llena de culpa sin dudas, pero si estás arrepentida de lo sucedido, será suficiente para que obtengas el perdón.
Es que no se que me pasó, no tenía pensado hacerlo, pero cedí a la tentación y siento tanta necesidad de hablar.
Bueno, si tienes esa necesidad, habla, te escucho, estoy para eso.
Seguro? Cuento todo? No quiero incomodarlo, le dije. Usted si hablo de más avíseme por favor. Igual, no se por donde empezar, es tanto…. Histeriquee un poco, con voz de beboteo.
Empezá por dónde quieras, tranquila, habla de lo que puedas.
Ay padre, me cogió Juan, el carnicero. Con el he pecado.
Y estás arrepentida?
No lo sé… yo no quería, pero me tente. Todo fue culpa de Olga, mí vecina, que me dijo que Juan le había dado una cogida impresionante, difícil de olvidar, y que tenía un pedazo de carne que era de otro mundo
Cómo no dijo nada, seguí contando… el jueves a la tarde, estaba aburrida y caliente, y dije porque no? Y me fui a la carnicería, me está siguiendo padre?
Si, atentamente.
“Atentamente” pensé, se interesó en la historia…se debe estar calentando… llegué a la carnicería y estaba cerrada, golpee la puerta y me atendió Juan y le dije que venía a buscar carne, me dijo abro a las 17, y ahora son las 14 hs.
Perdón Juan, lo se, pero quería el mejor pedazo de carne que tengas, por eso vine temprano, Olga me dijo que venga a esta hora.
Así que querés un buen pedazo de carne piba? Vení, pasa, me dijo…. Y pasé.
Tendré perdón padre?
Claro que si hija, por supuesto, pero para saber que penitencia darte, necesito seguir escuchando…
Ahí me di cuenta, que mí confesor, se estaba calentando… y yo iba por más… si padre, ya le cuento todo….
Cuando entre a la carnicería, cerro la puerta de entrada, le puso llave, y me dijo anda para el mostrador, cuando me adelante, su mano me agarró el culo de manera fuerte y sus dedos, se metieron en el agujero a pesar de mis calzas, y pegue un grito gemido de sorpresa….lo miré, le dije con una sonrisa, que bienvenida, y sin soltar mí culo, me llevo hacia el y me comió la boca de un beso, el que no tuve más opción que responder…
Padre, lo noto agitado, está bien? Le pregunté.
Si, respondió tratando de reponerse. Que paso después, dijo con voz entrecortada.
Ay, después del beso, me pidió que me arrodillara para probar el pedazo de carne que tenía para darme… mí cuerpo y mí mente estaban muy calientes, así que accedí, y me arrodille, así como estoy ahora… le dije a mí curita..
Esbozo una sonrisa nerviosa y me dijo,.... Y entonces?
Quiere que siga padre? O es suficiente…
Seguí por favor, me dijo…
Padre, está caliente,?
No debería, pero si, me contestó…
Ayyy, no quiero ponerlo así, y si se le para la pija? Si quiere dejamos acá.
Si se para después veré, seguí por favor ..
Bueno .. sigo…me arrodille frente a él, y con sus manos de bajo el pantalón y saco un pedazo de pija enorme, largo y gordo que puso en mí boca, a la que recibí con gusto… padre, le juro, no estaba del todo dura, pero apenas cabia en mí boca, empecé a chuparla, y se puso al palo, en todo su esplendor.
Me estaba comiendo el mejor pedazo de carne que había conocido, y me sentí sucia, infiel puta caliente, y la chupe con devoción, con ganas haciendo ruido, pase la lengua por toda la pija, hasta que sentí que su cabeza estaba cada vez más hinchada, y empezaba a temblar…. Chupe más fuerte … y de repente sentí un grueso y espeso chorro de leche caliente en mí boca … que salía de a chorros….
Ayyyy hija, paremos acá por favor….
En serio padre? Bueno… si me lo pide así… seguro debe tener la pija al palo, lo entiendo, porque yo estoy toda mojada…
Siiii, tengo la pija completamente dura….
Bueno, le dije susurrando, no quiere saber que más paso?....
Si claro que quiero, me dijo… pero…
Bueno, si quiere, mientras le cuento, se pajea, igual nadie lo ve, pero si le salta la leche, me avisa, si? ..
Dale, seguí .. me dijo, ya con voz de estar muy caliente.
Bueno … con toda esa leche en la boca, no tuve otra opción que tragarla y limpiarle todo el resto de leche de la cabeza… así que me dedique a eso, y de repente me di cuenta que esa verga estaba en todo su esplendor nuevamente.
Me levanto con sus manos y me puso de frente al mostrador, me bajo las calzas, y dejo al desnudo mí culo, sin decir palabra alguna se puso detrás mío , y con su enorme manos me separó las piernas, y con la otra metió sus dedos en mí concha, arrancándome jadeos y gemidos, así estuvo un rato, hasta que me arranco un orgasmo muy fuerte, temble, grite, y me moje toda, mis piernas se aflojaron y mí calentura aumento…. Luego de eso, sentí que esa barra enorme de carne y venas se metía en mí concha mojada, entraba resbalando centímetro a centímetro, haciéndome gemir y gemir, fuerte, muy fuerte, y sin poder manejar a conciencia mí cuerpo, me di cuenta que mí cadera, se movió empujando mí cola para atrás, desesperada por meter toda esa verga dentro mío. Y lo logré, lo poco que quedaba por entrar, antes que los huevos enormes que tenía chocarán con mí piel lo metió, abriéndome de par en par los cachetes del culo…
Me sentí completamente penetrada y dominada, me sentí puta y entregada….
Ahhhhhhhhh, haaaaaaaa,estoy acabandooooo, me dijo el cura…..
Ayyyy padre, que caliente, tengo un poquito más, quiere escuchar…
Siiiii, creo que tengo más leche para sacar … seguí por favor…
Bueno, le decía que me sentía completamente penetrada y dominada, me sentí puta y entregada, y el lo sabía, por eso empezó a penetrarme como si fuéramos animales en celo, no dejaba de machacar su pija contra mí concha, y así estuvo mucho tiempo, donde gemi, pedí por más, grite, insulte, goze y acabe dos veces, hasta que no aguanto más y descargó toda la leche de sus bolas en los cachetes de mí cola y en el augero de mí culo…. Fue tremendo padre…
Siiii hija, siiiii, tremendo, otra vez estoy completamente duro, ahí termino o hay más?....
Padre, hay un poquito más, quiere escucharlo y acabar de nuevo?
Siiiiii, por favor!!!
Padre, yo sigo .. pero quiero ver su pija dura, puedo????
Si, ahí corro la ventanita, mirá….
Guauuuu, padrecito… enormeeee durísima, sigo para que acabe ….
Si, por favor!!!
Con todo el culo lleno de leche fue fácil que lo metiera, y sin descansar ni un poquito, me penetró la cola…. Imagínese, todo ese pedazo dentro mío, no paraba nunca de entrar, y cuando empezó a moverse, no deje nunca de gemir y de gritar, me estaba partiendo el orto, se lo dije, y el hijo de puta lo disfrutaba…. Me cojia cada vez más fuerte y más profundo, y mientras lo hacía, sus dedos fueron a mí clítoris, y me arranco dos orgasmos tremendos, tan pero tan fuertes, que con el último moje todo el piso de la carnicería, y eso se ve que lo excito mucho, porque los últimos quince veinte movimientos fueron de una penetración muy profunda, hasta que en las últimas embestidas sentí que su cabeza latía y me largaba chorros de leche dentro del culo…
Ayyyy mujer, estoy acabando de nuevo….. tremendo… me dijo
Hermoso padre, hermoso, tanto como toda esa leche que quedó en mí culo, y con la que me fui a mí casa….
Estaré perdonada?
Si claro que siiii, me contestó…
Y si vuelvo a ser infiel? Le pregunté…
Volvé y te confesas de nuevo, para que obtengas perdón…
Bueno padre, pero en unos días volveré a pecar, porque aún me duele el culo …
No me voy a describir, pero solo voy a decir que soy objeto de deseo de cada uno de los habitantes de este pueblo, hombres y mujeres. A eso hay que sumarle que soy sexualmente muy activa y caliente.
El único problema de estar aburrida y frustrada tanto en la vida social como sexual, es que se me ocurren ideas perversas y morbosas.
Por eso, decidí llevar al extremo la paciencia y el celibato de este nuevo pastor de la iglesia. Quiero ver hasta dónde es capaz de resistir el erotismo y lo explícito de mis aventuras sexuales.
Es domingo ,voy a la iglesia a confesarme de algunos pecados de esta semana…Y me preguntó, ¿podré contarle todo? Me escuchará, hasta donde querrá saber, despertaré su morbo, se calentará a través de mis relatos, o solo sentirá compasión? Podré ser explícita, aceptará detalles? ¿Los querrá escuchar?
Ya llego, son las 11 de la mañana, mí esposo se fue al bar, cómo cada domingo, a juntarse con amigos, a comer y beber, y a hacer gala de sus logros en los negocios y con su mujer, o sea, yo.
La iglesia por la hora está semivacía, y el confesionario sin fieles, adentro espera el, mí objetivo, tanto para que calme mí culpa, tanto para llevar a cabo mí morboso juego.
Buenos días padre,
Buenos días hija!
Fue el saludo de rigor.
Qué te trae por aquí, me preguntó con voz dulce y tranquila.
La culpa, padre, le respondí, mucha culpa por haber pecado.
Porque tienes tanta culpa, que te pasa? Cual fue tu pecado?
Ay padre, si yo cuento lo que me pasa, no sale de acá, no?
Claro hija, hay secreto de confesión, solo Dios y nosotros sabremos de que se trata.
Eso me deja tranquila, mí pecado es haber caído en la tentación y le fui infiel a mí esposo. Eso me llena de culpa.
Mmmmm, es un pecado grave, que llena de culpa sin dudas, pero si estás arrepentida de lo sucedido, será suficiente para que obtengas el perdón.
Es que no se que me pasó, no tenía pensado hacerlo, pero cedí a la tentación y siento tanta necesidad de hablar.
Bueno, si tienes esa necesidad, habla, te escucho, estoy para eso.
Seguro? Cuento todo? No quiero incomodarlo, le dije. Usted si hablo de más avíseme por favor. Igual, no se por donde empezar, es tanto…. Histeriquee un poco, con voz de beboteo.
Empezá por dónde quieras, tranquila, habla de lo que puedas.
Ay padre, me cogió Juan, el carnicero. Con el he pecado.
Y estás arrepentida?
No lo sé… yo no quería, pero me tente. Todo fue culpa de Olga, mí vecina, que me dijo que Juan le había dado una cogida impresionante, difícil de olvidar, y que tenía un pedazo de carne que era de otro mundo
Cómo no dijo nada, seguí contando… el jueves a la tarde, estaba aburrida y caliente, y dije porque no? Y me fui a la carnicería, me está siguiendo padre?
Si, atentamente.
“Atentamente” pensé, se interesó en la historia…se debe estar calentando… llegué a la carnicería y estaba cerrada, golpee la puerta y me atendió Juan y le dije que venía a buscar carne, me dijo abro a las 17, y ahora son las 14 hs.
Perdón Juan, lo se, pero quería el mejor pedazo de carne que tengas, por eso vine temprano, Olga me dijo que venga a esta hora.
Así que querés un buen pedazo de carne piba? Vení, pasa, me dijo…. Y pasé.
Tendré perdón padre?
Claro que si hija, por supuesto, pero para saber que penitencia darte, necesito seguir escuchando…
Ahí me di cuenta, que mí confesor, se estaba calentando… y yo iba por más… si padre, ya le cuento todo….
Cuando entre a la carnicería, cerro la puerta de entrada, le puso llave, y me dijo anda para el mostrador, cuando me adelante, su mano me agarró el culo de manera fuerte y sus dedos, se metieron en el agujero a pesar de mis calzas, y pegue un grito gemido de sorpresa….lo miré, le dije con una sonrisa, que bienvenida, y sin soltar mí culo, me llevo hacia el y me comió la boca de un beso, el que no tuve más opción que responder…
Padre, lo noto agitado, está bien? Le pregunté.
Si, respondió tratando de reponerse. Que paso después, dijo con voz entrecortada.
Ay, después del beso, me pidió que me arrodillara para probar el pedazo de carne que tenía para darme… mí cuerpo y mí mente estaban muy calientes, así que accedí, y me arrodille, así como estoy ahora… le dije a mí curita..
Esbozo una sonrisa nerviosa y me dijo,.... Y entonces?
Quiere que siga padre? O es suficiente…
Seguí por favor, me dijo…
Padre, está caliente,?
No debería, pero si, me contestó…
Ayyy, no quiero ponerlo así, y si se le para la pija? Si quiere dejamos acá.
Si se para después veré, seguí por favor ..
Bueno .. sigo…me arrodille frente a él, y con sus manos de bajo el pantalón y saco un pedazo de pija enorme, largo y gordo que puso en mí boca, a la que recibí con gusto… padre, le juro, no estaba del todo dura, pero apenas cabia en mí boca, empecé a chuparla, y se puso al palo, en todo su esplendor.
Me estaba comiendo el mejor pedazo de carne que había conocido, y me sentí sucia, infiel puta caliente, y la chupe con devoción, con ganas haciendo ruido, pase la lengua por toda la pija, hasta que sentí que su cabeza estaba cada vez más hinchada, y empezaba a temblar…. Chupe más fuerte … y de repente sentí un grueso y espeso chorro de leche caliente en mí boca … que salía de a chorros….
Ayyyy hija, paremos acá por favor….
En serio padre? Bueno… si me lo pide así… seguro debe tener la pija al palo, lo entiendo, porque yo estoy toda mojada…
Siiii, tengo la pija completamente dura….
Bueno, le dije susurrando, no quiere saber que más paso?....
Si claro que quiero, me dijo… pero…
Bueno, si quiere, mientras le cuento, se pajea, igual nadie lo ve, pero si le salta la leche, me avisa, si? ..
Dale, seguí .. me dijo, ya con voz de estar muy caliente.
Bueno … con toda esa leche en la boca, no tuve otra opción que tragarla y limpiarle todo el resto de leche de la cabeza… así que me dedique a eso, y de repente me di cuenta que esa verga estaba en todo su esplendor nuevamente.
Me levanto con sus manos y me puso de frente al mostrador, me bajo las calzas, y dejo al desnudo mí culo, sin decir palabra alguna se puso detrás mío , y con su enorme manos me separó las piernas, y con la otra metió sus dedos en mí concha, arrancándome jadeos y gemidos, así estuvo un rato, hasta que me arranco un orgasmo muy fuerte, temble, grite, y me moje toda, mis piernas se aflojaron y mí calentura aumento…. Luego de eso, sentí que esa barra enorme de carne y venas se metía en mí concha mojada, entraba resbalando centímetro a centímetro, haciéndome gemir y gemir, fuerte, muy fuerte, y sin poder manejar a conciencia mí cuerpo, me di cuenta que mí cadera, se movió empujando mí cola para atrás, desesperada por meter toda esa verga dentro mío. Y lo logré, lo poco que quedaba por entrar, antes que los huevos enormes que tenía chocarán con mí piel lo metió, abriéndome de par en par los cachetes del culo…
Me sentí completamente penetrada y dominada, me sentí puta y entregada….
Ahhhhhhhhh, haaaaaaaa,estoy acabandooooo, me dijo el cura…..
Ayyyy padre, que caliente, tengo un poquito más, quiere escuchar…
Siiiii, creo que tengo más leche para sacar … seguí por favor…
Bueno, le decía que me sentía completamente penetrada y dominada, me sentí puta y entregada, y el lo sabía, por eso empezó a penetrarme como si fuéramos animales en celo, no dejaba de machacar su pija contra mí concha, y así estuvo mucho tiempo, donde gemi, pedí por más, grite, insulte, goze y acabe dos veces, hasta que no aguanto más y descargó toda la leche de sus bolas en los cachetes de mí cola y en el augero de mí culo…. Fue tremendo padre…
Siiii hija, siiiii, tremendo, otra vez estoy completamente duro, ahí termino o hay más?....
Padre, hay un poquito más, quiere escucharlo y acabar de nuevo?
Siiiiii, por favor!!!
Padre, yo sigo .. pero quiero ver su pija dura, puedo????
Si, ahí corro la ventanita, mirá….
Guauuuu, padrecito… enormeeee durísima, sigo para que acabe ….
Si, por favor!!!
Con todo el culo lleno de leche fue fácil que lo metiera, y sin descansar ni un poquito, me penetró la cola…. Imagínese, todo ese pedazo dentro mío, no paraba nunca de entrar, y cuando empezó a moverse, no deje nunca de gemir y de gritar, me estaba partiendo el orto, se lo dije, y el hijo de puta lo disfrutaba…. Me cojia cada vez más fuerte y más profundo, y mientras lo hacía, sus dedos fueron a mí clítoris, y me arranco dos orgasmos tremendos, tan pero tan fuertes, que con el último moje todo el piso de la carnicería, y eso se ve que lo excito mucho, porque los últimos quince veinte movimientos fueron de una penetración muy profunda, hasta que en las últimas embestidas sentí que su cabeza latía y me largaba chorros de leche dentro del culo…
Ayyyy mujer, estoy acabando de nuevo….. tremendo… me dijo
Hermoso padre, hermoso, tanto como toda esa leche que quedó en mí culo, y con la que me fui a mí casa….
Estaré perdonada?
Si claro que siiii, me contestó…
Y si vuelvo a ser infiel? Le pregunté…
Volvé y te confesas de nuevo, para que obtengas perdón…
Bueno padre, pero en unos días volveré a pecar, porque aún me duele el culo …
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