Nos despertamos al otro día, yo tenía la pija inchada y roja de haberme cogido el orto hermoso ese, ella me arañaba el pecho, con esas uñas de gatita feliz, le faltaba ronronear y estaba completa, me dijo si no se podía quedar unos días en casa hasta que pasara todo el bardo con la madre, así que ni lo pensé y le dije que si, toda putona se levantó se puso esa tanguita que no le taba el hueco abierto que tenía en el orto, se cambió y me dijo dale papi lleva a la nena hasta la casa de la trola esa que te cogías antes q buscar unas ropitas, me levanté y más caliente y cagado que nunca arrancamos para la casa de mi ex, ella toda altanera iba pensando en todo lo que le iba a decir cuando llegue, así que recordando viejas épocas llegamos a la cada, me dijo bancarme un toque que armó una mochi y salgo, me quedé afuera sobándome la pija, me ardia, pero estaba loco con la pendeja y ahí pensando en eso escucho el kilombo adentro, ella puteandose feo con la madre, yo rogando que salga rápido así rajaba a la mierda, en eso se abre la puerta y salió a los gritos la pendeja, abrió la puerta del auto y subió , vamos pa está mina es infumable, en eso la veo salir, ahí recordé esas tetas hermosas cuando me vio estaba furiosa, solo quedó callada y helada, arranque y nos fuimos, no le di tiempo a reaccionar, y la pendeja más que piya lo noto, y me dijo tenés la pija dura por la pelotuda está? Y sobandomela , mirándome a los ojos me tiró, o por esta pendeja que te coge y te saca toda la leche, no sabía que contestarle, la agarre de la nuca y le comí la boca, ese sabor a pendeja puta me volvía loco, por vos pendeja hermosa, fue todo lo que dije.
Llegamos a casa, cuando ahí caí en la cuenta de que toda su ropa estaba en una mochila, , le hice lugar para su ropa, efectivamente eran todas diminutas , más me calenté, yo tenía que salir a hacer unos trámites, se lo dije me perfume y arranque, andaba en lo mío y me llega un mensaje de la madre, diciéndome que no podía creer lo que estaba haciendo , que la cuide y que no la deje embarazada,
Solo le dije si, quédate tranquila
Al mediodía vuelvo a casa, la cumbia sonaba a full en el equipo, cuando entro a la cocina la vi, con ese culo hermoso partido por una tanguita diminuta que ni se veía perdida en esa inmensidad, , en tetas y descalza, no me escucho llegar por la música al palo, la apolle de atrás con la pija muy dura y cabezona, manoseando le las tetas, ella paro la colita y se dejó manosear, le corrí el hilito y le ensarte la pija en la concha que ya volaba de flujo y calentura, me la entre a coger fuerte, sintiendo todo lo puta que podía ponerse esa pendeja, sentía como me chorreaba su flujo a lo bestia y más me calentaba seguí cogiéndola un rato largo, se la saqué, la di vuelta sentandola en la mesada , le comí la boca ensartando le toda la pija de nuevo, me abrazo con sus piernas enterrandosela más adentro, sentirá que me explotaba la pija, apoyo su boca en mi oído y sentí somos gimiendo y gritando termina en un orgasmo tremendo, seguí bomeandola, su flujo caía por mis piernas, me calienta, y explote litros de leche adentro de su concha, no quería sacarla, seguía bombeando y sentí que se prendió de nuevo, la levanté con mis manos en el orto, enterrandole bien la pija, genia locamente y yo volaba de placer, mis venas estaban a pleno y las sentía por la manera que genia y gritaba, me tiró otro orgasmo mojando me completo, estaba caliente la dejaba caer con todo su peso sobre mi pija, y no podía acabar, seguía cogiéndola y sus ojitos de puta caliente ya estaban blancos, le llené otra vez bien de leche esa concha tremenda que me vuelve loco, estábamos echos in desastre, la lleve al baño y nos pegamos una ducha, parecíamos dos enamorados besándonos y abrazándonos. Cuando salimos era un humo increíble, ahí me dijo que boluda me olvidé las milas en el horno, así me bolas pedí una pizza, nos secamos estábamos a los besos en el sillón, se puso una remera larga, me pidió plata y así atendió al deliberó. Comimos charlamos un rato y nos quedamos así en pelotas escuchando cumbia mientras la pendeja cantaba todos los temas y yo trataba de entender alguno
Llegamos a casa, cuando ahí caí en la cuenta de que toda su ropa estaba en una mochila, , le hice lugar para su ropa, efectivamente eran todas diminutas , más me calenté, yo tenía que salir a hacer unos trámites, se lo dije me perfume y arranque, andaba en lo mío y me llega un mensaje de la madre, diciéndome que no podía creer lo que estaba haciendo , que la cuide y que no la deje embarazada,
Solo le dije si, quédate tranquila
Al mediodía vuelvo a casa, la cumbia sonaba a full en el equipo, cuando entro a la cocina la vi, con ese culo hermoso partido por una tanguita diminuta que ni se veía perdida en esa inmensidad, , en tetas y descalza, no me escucho llegar por la música al palo, la apolle de atrás con la pija muy dura y cabezona, manoseando le las tetas, ella paro la colita y se dejó manosear, le corrí el hilito y le ensarte la pija en la concha que ya volaba de flujo y calentura, me la entre a coger fuerte, sintiendo todo lo puta que podía ponerse esa pendeja, sentía como me chorreaba su flujo a lo bestia y más me calentaba seguí cogiéndola un rato largo, se la saqué, la di vuelta sentandola en la mesada , le comí la boca ensartando le toda la pija de nuevo, me abrazo con sus piernas enterrandosela más adentro, sentirá que me explotaba la pija, apoyo su boca en mi oído y sentí somos gimiendo y gritando termina en un orgasmo tremendo, seguí bomeandola, su flujo caía por mis piernas, me calienta, y explote litros de leche adentro de su concha, no quería sacarla, seguía bombeando y sentí que se prendió de nuevo, la levanté con mis manos en el orto, enterrandole bien la pija, genia locamente y yo volaba de placer, mis venas estaban a pleno y las sentía por la manera que genia y gritaba, me tiró otro orgasmo mojando me completo, estaba caliente la dejaba caer con todo su peso sobre mi pija, y no podía acabar, seguía cogiéndola y sus ojitos de puta caliente ya estaban blancos, le llené otra vez bien de leche esa concha tremenda que me vuelve loco, estábamos echos in desastre, la lleve al baño y nos pegamos una ducha, parecíamos dos enamorados besándonos y abrazándonos. Cuando salimos era un humo increíble, ahí me dijo que boluda me olvidé las milas en el horno, así me bolas pedí una pizza, nos secamos estábamos a los besos en el sillón, se puso una remera larga, me pidió plata y así atendió al deliberó. Comimos charlamos un rato y nos quedamos así en pelotas escuchando cumbia mientras la pendeja cantaba todos los temas y yo trataba de entender alguno
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