You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Una curiosa clase de zumba parte final 🥵 (relato erótico)

Comencé el año peleado como siempre con mi esposa, llevábamos ya años sin ninguna interacción física y el porno era mi único desahogo, sin embargo está vez había algo distinto, algo que guardaba celosamente al fondo de mi cajón.
Hace apenas un par de semanas, mi maestra de zumba me había regalado algo maravilloso por navidad, un regalo que jamás me hubiera imaginado recibir pero ahora era mi más grande tesoro, una panti negra impregnada de su semen. Si, el de ella, Sofía mi maestra de zumba era trans.

Una curiosa clase de zumba parte final 🥵 (relato erótico)


Justo antes de las vacaciones ví a escondidas como se masturbaba frente al espejo del estudio donde nos da clases,así que solo estaba esperando a que se reanudarán las clases para verla de nuevo. Por fin fue a mediados de enero cuando llegó el mensaje al grupo de what's diciendo que las clases de zumba se reanudarían el siguiente miércoles. Llegué temprano al estudio con la intención de buscar a mi amiga Laura y contarle lo sucedido con el regalo, aunque primero tenía que contarle la historia completa del vestidor...

-Es neta?! -pregunto casi en un grito, con lo que algunas voltearon a vernos
-Shhhh, bájale a tu volumen! Si eso fue lo que pasó, al final solo me fui sin hacer ruido y ya después en la cajita me dió la panti manchada con la nota.
-No mames! Te dije que si te había visto!
-Entonces... Crees que le gusto?
-Eres tonto? Obviamente! Se dió cuenta de que la veías y por eso comenzó a masturbarse! No mames Ramón te voy a matar si no aprovechas la oportunidad

En eso la puerta se abrió y Sofía entró, no sé si era que ya la había visto desnuda pero la veía más sexy que el año anterior, casi casi podía notar su verga ajustada bajo su panti. Ella nos vio a todos y al mirarme sonrió ampliamente a lo cual le contesté con una sonrisa igual. Toda la hora no pude más que mirarla, y de solo imaginarmela desnuda y con una erección haciendo las rutinas mi verga se ponía dura de inmediato. Laura no dejaba de mirarme y de mirarla a ella, como tratando de entender que pasaría a continuación, no se había quedado tranquila desde que le conté lo sucedido, al terminar a clase todas comenzaban a cambiarse y entonces me acerque a ella para hablar.

tetas


-Hola maestra, que buena clase.

Ella se giro para verme, acabado de hacer ejercicio sus pechos subían y bajaban por la respiración agitada, brillaban un poco por el sudor a la luz de la lámpara. Sus pezones se comenzaban a remarcar en el top.

-Hola Ramón, que bueno que te gustó. Y que gusto tenerte aquí de nuevo.
-Gracias, la verdad me gustan mucho sus clases y... -no queria que me escucharan -También quería agradecerle el regalo.

Ella se quedó callada un momento, volteo a ver si nos veían y se acercó un poco más a mi, viéndome a los ojos, su mirada era diferente, intensa, puso su cara muy cerca de mi, sus labios carnosos de melocotón brillaron por un momento, podia sentir su respiracion agitada, puso su boca junto a mi oído para hablarme apenas en un susurro que solo yo escuchara y su voz cambió... A un tono más bajo y sensual que me erizó la piel.

-Entonces... te gustó mi Panti?
-S-si -tartamudee sin poder moverme
-Y te gustó verme desnuda? -asenti nervioso, ella bajo su mano y comenzó a acariciarme discretamente por encima del shorts -Y te gustó verme con mi verga parada?

Baje la vista por un momento, sus pezones se remarcaban aún más contra el top deportivo y su erección ya comenzaba a notarse también, eso me calentó muchísimo, quería tocarle la verga, sacarsela ahí mismo pero sabía que nos estaban viendo.

-Si, bastante.
-Mmm -se acerco un poco más, a darme una sutil lamida en la oreja -a ver cuando me enseñas la tuya?

Ya no había ninguna duda de que quería lo mismo que yo, comencé a mover mi mano lentamente, roce primero su pezón con lo que ella soltó un pequeño gemido (ahh) y seguí un poco más, quería tocarla también de abajo aunque fuera por encima del leggins, pero cuando estaba a punto de lograrlo, Laura me habló desde un poco más lejos interrumpiendo el momento. Ambos dimos un respingo y nos separamos abruptamente, Sofia se alejo de mí en el acto apenada con el pretexto de acomodar unas cosas.

-Que quieres Lau? -Dije entre dientes, ella me vio divertida, de arriba hacia abajo fijando la mirada y notando mi erección, yo me gire un poco.
-Jajaja nada, solo quería decirte que ya casi puedes pasar a cambiarte.
-Gracias... -le dije con sarcasmo -algo más?
-Si, que si querias ayuda con tu amiguito? -E inmediatamente hizo un amague como de querer agárrame la verga.
-Laura!! -Dije haciéndome hacia atrás por reflejo.

Y ella se fue a cambiar riéndose mientras yo me quedé esperando. Cuando terminé de cambiarme salí con la esperanza de seguir hablando con Sofía pero para mí sorpresa Laura estaba esperándome en la puerta lo cual se me hizo inusual y más después de lo que acababa de acontecer, no tuve más remedio que irme con ella y camino a la parada decidí preguntarle.

relato


-A ver Lau, platícame, cuál es el plan?
-Plan? Cual plan? No sé de que me hablas... -Me dijo divertida claramente sabía a lo que me refería.
-Si si, jamás te habías quedado a esperarme y no creo en las casualidades, así que cuéntame que necesitas?
-Nada malo, no te preocupes somos amigos y simplemente me gusta molestarte y andar de caga palos. Si yo no cojo tu tampoco, quiero ver cómo sufres jajaja
Me quedé en silencio viéndola, pensando en lo que me acaba de decir. Me estaría bromeando? Aunque su cara denotaba determinación. No le di mucha importancia entonces y seguí mi camino sin imaginar lo que se vendría a continuación.

~~~~~~~~~~~~~~ ¢ ~~~~~~~~~~~~~~

Pasadas un par de semanas, aún no había logrado más allá de miradas y sonrisas con Sofía, porque cada que me acercaba Laura aparecía sonriente para interrumpir y molestarme, cumpliendo su amenaza, hasta dónde llegaría su afán por sabotearme? Yo no podía más que masturbarme por las noches pensando en todo lo que quería hacerle a Sofía, imaginando el momento donde nos quedaremos a solas y por fin pudiera tocar su cuerpo por completo, mi cerebro ya estaba tan lleno de porno trans que simplemente ya sabía que tenía que hacer paso por paso y solo planeaba maneras de poder deshacerme de Laura, hasta un viernes que tuve mi oportunidad.
Ese día ya iba tarde a clase, llegué al estudio justo cuando empezaban el calentamiento así que corrí al vestidor a cambiarme. Sali y me puse en el lugar de siempre esperando algún comentario sarcástico de Laura pero este no llegó, mire a ambos lados pero no la vi.

-Laura no vino -me dijo otra de las alumnas.

Voltee alrededor un par de veces para corroborarlo y al frente vi a Sofía, recorriendo con la mirada a toda la clase en el reflejo del espejo, finalmente se dio cuenta de lo mismo que yo. Terminó por fijar la vista en mi y sonriendo ampliamente me guiño un ojo, por fin tendría via libre para aquello que llevaba semanas deseando. En cuanto la clase acabo me fui al fondo del salón esperando a que todas se cambiarán y se fueran para por fin estar a solas, fue mi turno de entrar al vestidor, pegue la oreja a la puerta escuchando a que saliera la última alumna.
Pasados unos minutos deje de escuchar risas y platicas así que abrí lentamente la puerta y solo ví a Sofía acomodando unas cosas frente al espejo. Sali del vestidor y sin decir nada la agarre de la cintura le di la vuelta y le plante un beso. Al principio se sorprendió, pero finalmente cedió y continuamos con un beso más profundo y apasionado liberando por fin todos esos sentimientos reprimidos.
Comencé a besarle el cuello mientras le acariciaba los pechos, sus pezones duros saltaban de su top y sin más le pellizque uno ligeramente dándole a entender que ya no me detendría por nada del mundo, ella lo entiendo perfectamente y separándose un poco de mi se quitó el top deportivo en el acto. Por fin pude ver de nuevo esos pechos perfectos, redondos, con una aureola color cafe obscuro coronado con los pezones apuntando al techo. Sin perder el tiempo hundi mi cara en ellos lamiendo uno mientras apretaba el otro. Sofia solo soltaba gemiditos (ahhh, si papi, ahh) mientras yo mamaba como desesperado, pasados unos minutos me dijo con aquella voz sensual de nuevo.

-Necesitas ayuda con eso? -y me agarro la verga ya durísima debajo del shorts.

Sin darme tiempo de contestar se agachó frente a mi, me bajo el shorts con todo y el boxer hasta los tobillos, mi verga salió disparada hacia arriba ya escurriendo un poco, sin quitarme la vista de encima se arremango el pelo, se lamió los labios y de una sola vez se la metió entera a la boca.

mamada


Comenzó a hacerme una mamada como jamás en la vida mi esposa me la había hecho, sacándose mi verga casi completa de la boca para después volversela a tragar completa, succionandola como si fuera un popote. Los sonidos que hacia me exitaba más y más, estaba en la gloria y no podía más que gemir y gemir de placer. Cambio de técnica y mientras me masajeaba los huevos comenzó a lamer mi verga como si fuera una paleta, pasando su lengua de arriba a abajo lentamente, deteniéndose de vez en cuando para chaquetearmela y voltear a verme de manera coqueta sonriendo. Claramente sabía lo que hacía y era tanta su maestría que comencé a sentir esos espasmos previos a la eyaculación.

-Ahh, Sofía...
-En la cara papi, dámelos en mi cara.

Y con un brillo en los ojos comenzó a masturbarme con mas fuerza y más rápido teniendo mi verga frente a ella con la boca abierta, al cabo de unos segundos no aguante más y dispare un par de chorros de leche caliente llenado su cara y su boca con mi producto.
Le ayude a levantarse y caminamos hacia el vestidor, ella rebuscaba en su maleta y yo me senté en el sillón, se paró frente a mi y mientras se limpiaba la cara con una toalla yo veía sus leggins, tenía muy marcando su bulto, apretado ya con una mancha de humedad debido a la exitación. Sin pensarlo mucho tome sus leggins y comencé a bajarlos lentamente para por fin liberar esa verga que brincoteo frente de mi apuntando hacia arriba. Era algo grande, unos 17 cm y de grosor medio, perfectamente erectos con la punta húmeda de un líquido transparente que relucía con la luz de la lámpara.
La tome con mi mano, por fin, después de semanas de imaginarmela la tenía frente de mi, ese trozo de carne suave al tacto pero dura como piedra me hipnotizaba. Nunca antes lo habría pensado pero en todos los vídeos porno que había visto tanto ella como él se chupaban la verga y parecía que ambos lo disfrutaban, me quedé quieto un momento, acariciándola lentamente y sin quitarle la vista. Sofia viéndome desde arriba me preguntó con calma...

-Amor, quieres probarla?
-Amm yo... Yo nunca...
-No te preocupes, te va a gustar

Y lentamente empezó a empujar su cadera hacia adelante viéndome a los ojos con una enorme sonrisa, sin rechistar abrí la boca para comenzar a comerme su verga, saboreándola, intentando abarcar cada centímetro sin mucho éxito, la recorría de arriba a bajo llenádola de saliva mientras me llenaba completa la boca y me llegaba casi hasta la garganta.
Sofia comenzó con un ritmo suave, como disfrutando cada segundo. Mientras yo con una mano le agarraba la verga, con la otra acariciaba sus muslos y sus nalgas buscando colar un dedo en su culo. Al sentirlo ella dejó escapar un gemido (ahh papi), y agarrándome del cabello, me metió aun más su verga dura. Con cada embestida, Sofía arqueaba la espalda lo que me decía que le gustaba, así que aumente mi velocidad y comencé a chupársela con más fuerza, apretándola con mi boca, y sin sacarla pasaba mi lengua por todos lados. Ella comenzaba a perder el control, su cuerpo temblaba y su respiración se hizo más fuerte, comenzaba a gemir una y otra vez (ahhh, ahhh, que rico) y eso me calentaba más, sabía perfectamente lo que estaba por suceder.

-Sigue amor, por favor no pares -me dijo con la voz entrecortada y sin soltarme el pelo.

gimnasio


Comencé a masturbarla mientras seguía chupándola, más y más rápido, pasados unos segundos Sofía se arqueó por completo, y un fuerte gemido salio al mismo tiempo que sentí como algo caliente me llenaba los cachetes. Un sabor dulce y ácido me lleno de repente sintiéndolo hasta mi garganta, era algo que jamás había probado pero en esos momentos no me importaba demasiado. Vi a Sofía toda sudorosa y jadeante y con los ojos entrecerrados y una gran sonrisa, finalmente y sin pensar me trague toda su leche.

-No sabes cuánto espere este momento. -Le dije.
-De verdad?
-Si desde que te vi aquella vez no he podido dejar de pensar en ti
-Que bueno mi amor, porque ahora quiero sentirte adentro.

Y me agarró la verga que sorprendente ya estaba dura de nuevo, poco a poco se fue sentando guiando mi verga hasta metérsela por completo. Ambos soltamos un fuerte gemido, se sentía apretado y muy caliente, nos quedamos así un momento solo se escuchaban nuestras respiraciones, después de unos segundos voltea a ver a Sofía a los ojos y ella asintió dándome la señal y comencé a moverme lentamente. Sofia solo subía y bajaba gimiendo por lo bajo, su cabeza hacia atrás viendo el techo disfrutando. Yo tenía la vista al frente, viendo su cuerpo sudoroso, sus tetas redondas brillando por el sudor con los pezones duros y su verga apuntando al techo se tambaleaban al mismo tiempo con los movimientos, esa imagen me encantó y comencé a subir el ritmo. Los gemidos comenzaron a aumentar (ahh te gusta mami?) (haaa así, sigue, más más) y el golpeteo de mi pelvis al chocar con su trasero resonaba en el pequeño cuarto junto con nuestras respiraciones que aumentaban.
En un brincoteo de Sofía tome su verga y comencé a masturbarla al tiempo que ella seguía cabalgandome, lo cual fue demasiado para ella, perdiendo totalmente el control de su ser comenzó a gritar de placer... (Ahhh! si! Ramón que rico! No pares!) Yo obediente seguí con mi tarea hasta que al cabo de unos minutos espesos chorros de leche caliente comenzaron a salpicar por todos lados mientras Sofía se arqueaba hacia atrás lo cual hizo que me viniera también dentro de ella casi al mismo tiempo.
Terminamos jadeando recostados en el sillon, aún manchados de semen y sudorosos, no podía creer que por fin hubiera podido cumplir mi tan anhelado plan. Recogimos y limpiamos todo lo que pudimos y justo antes de salir me detuvo un momento...

-Amm Ramón -parecia apenada -Podemos mantener esto en secreto?
-Ah! Mmm si claro -Conteste aunque un poco desconcertado.
-Lo que pasa es que no me gustaría que se hiciera un relajo con la clase como la última vez.
-Descuida, no te preocupes -dije aliviado y pensando en mi esposa -no le diré a nadie que me das "clases extras"
-Y creeme que esas no te las voy a cobrar jajaja

Y salimos prometiendo que guardariamos en secreto nuestras clases privadas y pensando como podíamos hacerle para repetirlo más seguido.

~~~~~~~~~~~~~~ ¢ ~~~~~~~~~~~~~~

Seguía con mis clases de zumba, no por conocer más gente si no por ver a Sofi que cada que nos mirábamos nos lanzabamos una mirada cómplice y a cada pequeña oportunidad nos rozabamos "por accidente". Obviamente Laura se dió cuenta, no se le iba una viva y tras mucho insistir e insistir, después de dos semanas de silencio un miércoles después de clases le conté lo que había sucedido...

-Y ya, finalmente nos vestimos y cada quien para su casa, prometimos no decirle a nadie así que calladita.
-No mames! No te creo, y...-hizo una pausa dramática -si la tiene grande entonces?
-Laura! Porque me preguntas eso?
-Ah curiosidad solamente jajaja, ya dime van a seguir cogiendo?

Tal vez era idea mía pero Laura parecía muy interesada en el tema, me pidió la explicación con lujo de detalles y conforme le iba contando se veía más y más impresionada, sin mencionar que sus pezones se veían duros bajo su blusa.

-Pues me gustaría, pero cierta amiga caga palos no me deja a solas con Sofi.
-Hay si Sofi, Sofi -se burlo, pero tenía una mirada extraña -mmm te propongo algo, dejo de molestarte para que puedas quedarte a solas con la miss, si a cambio me cuentas como estuvo.
-Que?! Y porque quieres saber eso?!
-Haa ya te dije, simple curiosidad! Solo dime aceptas o no?

Claramente aquí había algo extraño, no era muy normal que Laura sintiera tanto interés en mi relación con Sofía, habría algún motivo oculto?. Sin embargo el tener una aliada en la clase me permitiria tener más acercamiento a Sofía así que finalmente acepté con la condición de no poder decirle a nadie.
Siguieron los meses y las cosas no podían estar mejor, cada semana en la clase del viernes Laura se encargaba de apurar a las demás chicas con pretextos para salir rápido lo que me permitia a mi quedarme a solas con Sofía para candentes sesiones de sexo y cada miércoles al final de la clase me iba a tomar un café con Laura para contarle lo de la semana anterior. Ella me escuchaba muy animada pidiéndome siempre hasta el más mínimo y sucio detallito, lo cual extrañamente le emocionaba bastante y a mí me complacía revivir para ella mis sesiones de sexo tan detalladas que terminaba con tremenda erección que Laura notaba.
Mi esposa no tenía ni idea, simplemente le decía que las clases ahora eran de dos horas y como a ella le daba lo mismo, no podía estar mejor. Un día después de vestirnos Sofía me preguntó si alguien sabía de nosotros y sin poder mentirle por completo le respondí.

-Pues Laura sabe que salimos pero solo eso, lo prometo.
-Con razón -dijo sonriendo.
-Porque?! Te dijo algo?
-No no, esque veo que te vas con ella los miércoles y andan muy juntos, así que pensé...
-Solo es mi amiga, nos llevamos bastante bien. Nada fuera de lo común, porque? Estás celosa?
-Ya, no está bien, no te preocupes solo era simple curiosidad.

Me miró por un momento como evaluandome, su cara era un misterio parecía estar pensando algo que yo no entendia, finalmente pareció tomar una decisión y me dijo...

-Sabes, ya tengo tu regalo de cumpleaños.
-Pero si mi cumpleaños es hasta la otra semana.
-Ya lo sé, por eso te la voy a dar la próxima semana... El viernes.

La clase del viernes transcurrió con normalidad, sin ningún indicio de festejo en la clase, supuse que sería entonces al quedarnos a solas, y me puse a pensar en cuál podría ser... alguna nueva lencería? Ella sabía que yo era un poco Geek, o sería algun cosplay? Eso me emocionó bastante y al momento de terminar la clase todas se fueron incluida Laura que apenas y se despidió. Era mi momento... Entre al vestidor y espere a que Sofía entrara, tal vez ya vestida o algo así pero no, simplemente asomo la cabeza y me preguntó que si ya estaba listo para mí sorpresa (Si claro, conteste) y me indico que saliera al salón.
Abrí la puerta y avance unos pasos después me quedé parado, boquiabierto sin poder creer lo que veía.
Frente a mi estaba Sofía sonriéndome parada únicamente con sus leggins puestos y sus tetas de fuera brillando a la luz de la lámpara y junto a ella estaba Laura! también sonriendo divertida con mi expresión, al igual que Sofía se había quitado el top y sus enormes tetas talla DD le colgaban libres con enormes aureolas cafés y pezones duros a juego, toda una milf he de reconocer.

trans

-Feliz cumpleaños amor.
-Si amigo, feliz cumpleaños.

Se voltearon a ver divertidas y luego ambas extendieron los brazos para que fuera a abrazarlas, sus tetas rebotaron un poco por la gravedad yo las ví como si fuera en cámara lenta, seduciéndome, bacile por un momento, sería posible? Ellas seguían sonriendo, voltee a ver a Sofía quien asintiendo ligeramente me guiño un ojo indicándome que todo estaba bien, así que sin más me acerque con una enorme sonrisa, bese a Sofía y despues me gire para ver a Laura, sus tetas eran enormes, tome una con mi mano con lo que ella dió un pequeño respingo, comencé a besarla y sentí como Sofía me sacaba la verga para acariciarla pero esa... Ya es otra historia amigos 😉

3 comentarios - Una curiosa clase de zumba parte final 🥵 (relato erótico)