You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Amigo de cristiano Jr se folla a Georgina

Estaba en casa de Cristiano Ronaldo Jr., pasando el rato como solíamos hacer. Pero hoy era diferente. Sabía que Georgina Rodríguez estaría allí, y eso me ponía nervioso y emocionado a la vez. Georgina siempre ha sido una mujer impresionante, con una presencia que llena cualquier habitación. Y hoy, estaba más atractiva que nunca.
Amigo de cristiano Jr se folla a Georgina

Mientras estábamos en la sala, charlando y riendo, Georgina se agachó para recoger algo que se le había caído. Mi corazón dio un vuelco al ver su cuerpo en esa posición. Llevaba unos jeans ajustados que realzaban cada curva, y su top dejaba poco a la imaginación. No pude evitar mirar fijamente, sintiendo cómo mi temperatura subía.

"¿Te gusta lo que ves?" preguntó Cristiano Jr. con una sonrisa pícara, dándome un codazo.

"Joder, tío, es que está para comérsela," respondí en voz baja, sin poder apartar la vista.

Georgina se levantó y me miró con una sonrisa cómplice, como si supiera exactamente lo que estaba pensando. "¿Todo bien por ahí, chicos?" preguntó, con un tono que me hizo sentir aún más incómodo y excitado.

"Sí, todo bien," respondí, tratando de actuar con naturalidad. "Solo estábamos... hablando de fútbol."

Georgina asintió y se dirigió a la cocina. "Voy a preparar algo de comer. ¿Quieren algo?"

"Claro, gracias, Georgina," respondió Cristiano Jr.

Mientras Georgina estaba en la cocina, decidí explorar un poco. Subí las escaleras sigilosamente, con el corazón latiendo con fuerza. Sabía que su habitación estaba en el segundo piso. Al llegar, vi que la puerta estaba entreabierta. No pude resistir la tentación de echar un vistazo. Dentro, todo estaba ordenado y limpio, pero lo que realmente llamó mi atención fue un cajón ligeramente abierto. Me acerqué y, con manos temblorosas, lo abrí un poco más. Dentro, vi su ropa interior, cuidadosamente doblada. Había de todos los colores y estilos, pero lo que realmente me llamó la atención fue un conjunto de encaje negro, delicado y seductor. No pude evitar sacar una prenda, sintiendo la suave tela entre mis dedos. Era un tanga de encaje que se veía increíblemente sexy. Lo guardé en mi bolsillo, sintiendo una mezcla de emoción y culpa.
argentina

Regresé a la planta baja, tratando de actuar con naturalidad. Cristiano Jr. me miró con una sonrisa pícara, como si supiera exactamente lo que había hecho.

"¿Encontraste algo interesante ahí arriba?" preguntó en voz baja.

"Puede ser," respondí, sonriendo.

Georgina regresó poco después, trayendo una bandeja con sándwiches y refrescos. "Aquí tienen, chicos. Espero que les guste."

"Gracias, Georgina. Estás haciendo un gran trabajo," dijo Cristiano Jr., dándole un beso en la mejilla.

Georgina sonrió y se sentó con nosotros. Comimos y seguimos charlando, pero yo no podía dejar de pensar en lo que había hecho. Tenía su ropa interior en mi bolsillo, y eso me hacía sentir una mezcla de emoción y culpa. Sabía que había cruzado una línea, pero no podía evitar sentirme excitado.

Más tarde, mientras Cristiano Jr. y yo estábamos en el jardín, hablando de nuestras cosas, vi a Georgina a través de la ventana de la cocina. Estaba lavando los platos, y su cuerpo se movía rítmicamente mientras fregaba. No pude evitar imaginarla desnuda, con el agua corriendo por su piel. Mi mente se llenó de imágenes eróticas, y sentí cómo mi pene se endurecía.
tetona

"Tío, estás en las nubes," dijo Cristiano Jr., dándome otro codazo.

"Lo siento, solo estaba... pensando," respondí, tratando de disimular.

"Ya, ya veo en qué estabas pensando," respondió con una risita.

Regresamos adentro y nos sentamos en el sofá. Georgina se unió a nosotros poco después, secándose las manos con un paño. Se sentó a mi lado, y pude oler su perfume, una mezcla de flores y algo más, algo más oscuro y tentador.

"¿Quieren ver una película?" preguntó, tomando el mando a distancia.

"Claro, suena bien," respondí, tratando de actuar con naturalidad.

Georgina puso una película, pero ninguno de los tres prestaba mucha atención. Estábamos demasiado ocupados coqueteando y riendo. En un momento dado, Georgina se inclinó hacia adelante para alcanzar algo en la mesa de café, y su top se levantó ligeramente, dejando ver un poco de su espalda y la parte superior de su culo. No pude evitar mirar, y sentí cómo mi pene se endurecía de nuevo.

"¿Te gusta lo que ves?" preguntó, mirando por encima del hombro con una sonrisa pícara.

"Mucho," respondí, sin poder apartar la vista.

Cristiano Jr. se levantó y se dirigió a la cocina. "Voy a buscar algo de beber. ¿Quieren algo?"

"No, gracias," respondimos Georgina y yo al unísono.

Cuando Cristiano Jr. se fue, Georgina se acercó a mí y me puso una mano en el muslo. "Sabes, he notado cómo me miras," dijo en voz baja.

"Lo siento, no puedo evitarlo. Eres muy atractiva," respondí, sintiendo cómo mi corazón latía con fuerza.

"No te disculpes," dijo, acercándose aún más. "Me gusta que me miren. Me hace sentir deseada."

Sentí su aliento en mi cuello, y su mano subió por mi muslo, acercándose peligrosamente a mi entrepierna. Mi pene estaba duro como una roca, y sabía que ella podía sentirlo. Cerré los ojos y me dejé llevar por la sensación, olvidándome de todo lo demás.

En ese momento, Cristiano Jr. regresó con las bebidas. "Aquí tienen, chicos," dijo, entregándonos los vasos.

Georgina se apartó de mí y tomó el vaso, sonriendo. "Gracias, cariño," dijo, dándole un beso en la mejilla.

Cristiano Jr. se sentó a nuestro lado y puso su brazo alrededor de Georgina. "¿De qué hablaban?" preguntó, mirando de uno a otro.

"De nada en particular," respondí, tratando de actuar con naturalidad. "Solo estábamos... charlando."

Cristiano Jr. asintió y puso la película en pausa. "Bueno, chicos, creo que es hora de que me vaya. Tengo que levantarme temprano mañana."

"¿Ya te vas?" pregunté, sintiendo una mezcla de alivio y decepción.

"Sí, pero ustedes quédense y disfruten," dijo, dándome una palmada en el hombro. "Nos vemos luego, ¿sí?"

"Claro, nos vemos," respondí, levantándome para despedirme.

Cristiano Jr. se fue, y Georgina y yo nos quedamos solos en el sofá.

10 PUNTOS PARA PARTE DOS

0 comentarios - Amigo de cristiano Jr se folla a Georgina