Hola este relato es la vivencia de mi vida, mi nombre es Mario tengo actualmente 20 años y quiero contarles como es que logré cogerme no solo a mi madre sino también a mi abuela y juntas!
Vivo en un pueblo rural del estado de puebla llamado zaclatan, a las afueras mi abuelo tiene un rancho donde la actividad principal es la agricultura y la ganadería, describiré mi entorno familiar para que se den una idea.
Mi abuelo Ramón un viejo de 62 años, mi abuela Maria(Mary de cariño, o abuelita) de 59, mi madre Olga de 41 son los miembros de esta familia, tengo más tíos hijos de mis abuelos, 2 para ser exactos pero por ahora no interesan en la historia ya que no viven con nosotros.
Mi madre Olga fue madre soltera de mi a sus 20 años, un ingeniero agrónomo que vino hace muchos años con el afán de ayudar a los habitantes de este lugar la preñó y la olvidó aquí una vez que se fue sin saber jamás de el, mis abuelos pusieron el grito en el cielo pues como es posible que su única hija sería la burla del pueblo al tener un hijo sin marido, mi madre eso me cuenta, que después que yo nací pues las cosas cambiaron mis abuelos la aceptaron en su casa y al irse mis tios ella quedó a cargó de mis abuelos.
Bueno se que les interesará saber cómo son las protagonistas de esta historia, bueno empezaré con mi madre, es una mujer normal, mide 1:60 de estatura, unos 60 kilos pesará o bueno yo calculo eso pues no es ni gorda ni flaca, es de tez clara apiñonada cabello a media espalda negro y de cara muy hermosa, ya se lo que les interesa y trataré de ser lo más específico posible, unas tetas, enormes, grandes, gordas, ninguna playera, blusa, suéter o lo que se ponga le hacen el mérito que necesita, es muy tetota, usa en tiempos de calor unas blusas de tirantes de una tela fina que se pega a su cuerpo, me encanta esa época del año pues son variadas esas prendas de muchos colores blancas, negras, melón, gris, azul,etc y para rematar en ocasiones al andar en casa después de bañarse tiene la costumbre de no usar brasier, entonces sus pezones se dibujan en la tela y se ven increíbles, con las blusas blancas y un poco de suerte de que esté mojadita se notan sus aureolas marrones, me encantan, bueno como dije no es gorda pero si tiene algo de pancita, pero nada exagerado, acostumbra usar leggins o mayones muy pegados y le dibujan una pucha muy carnosa, tiene un papo muy gordito, sus piernas son firmes me encantan que se le marcan increíble con la ropa que usa y para terminar, su enorme culo, mi mamá tiene un culote, dos nalgotas grandes, duras, paraditas y si a eso le sumamos que todo el tiempo usa tangas, normales, colaless, de hilo, bueno imagínense la que sea ella las usa todas, como lo se? Pues por dos cosas, una por qué aveces dependiendo la ropa que use se le marcan o hasta se le ven por encima y dos, por qué las deja en el baño después de bañarse, así que las conozco todas, las eh tocado, me las eh restregado en la verga y se las eh enlechado en más de una ocasión.
Ahora mi abuela, es una mujer un poco más alta que mi madre 1:70 de complexión más robusta pues es algo gordita, al igual que mi madre tiene unas tetas enormes y un culo también bastante grande, no puedo describirlas igual pues mi abuela es más recatada, siempre usa faldas o vestidos pero nada fuera de lo normal para una señora de su edad siempre abajo de la rodilla y algo tapada si me lo preguntan aún así me eh puesto por ahí a espiar un poco y eh logrado verla en ropa interior, igual normal para su edad calzones enteros y brassieres grandes que cubren todo, medias en las piernas y no deja ver nada de piel, bueno después sabrán que eso cambio una vez que me la cogí pero por ahora así es ella.
Por último pues me toca describirme un poco para que me conozcan, soy algo de 1:80 moreno, de complexión fuerte pues el trabajo en el campo me ha tonificado el cuerpo, tengo sixpac o cuadritos en el estómago para que me entiendan, fuertes brazos y piernas duras, considero que tengo buena verga, 19 CM en erección total, soy teem carne así que en reposo está en unos 15cm, bastante gorda y cabezona, estoy sircunsidado así que tengo la cabeza expuesta, tengo poco bello aun así me gusta llevarla rasurada siempre que se puede para que se vea aún más imponente.
Bueno comenzaré contandoles que cuando era una más chico de unos 11 o 12 años más o menos yo aún dormía con mi mamá no solo en la misma habitación sino en la misma cama, mi madre siempre fue muy destapada en esa habitación nunca le dio pena conmigo pues les contaré que al llegar de la jornada de trabajo del campo ella entraba directo al baño toda la ropa que traía sucia iba directo al sesto antes de entrar a la regadera y podía verla pasear en el cuarto en brassier y tanga, aveces en pura tanga y si mi suerte era mejor aveces denuda, me encantaba eso pues ella siempre llevaba la vagina rasurada y para mí ver eso era la gloria, ya que salía del baño aveces en toalla enredada se la quitaba y así mojadita desnuda paseaba en el cuarto buscando su ropa interior o poniéndose sus cremas en el cuerpo, me encantaba verla ponerse una crema blanca por todo su cuerpo, entre sus tetas, su vientre, su panochota sus piernas, su culo, yo no perdia detalle aunque me tenía que hacer el loco en que estaba viendo TV o haciendo alguna tarea pero sin dejar de mirar el espectáculo.
Al terminar se ponía una bata o ropa de andar en casa pues bajaba a hacer la cena para mí y aveces para mis abuelos.
Al regresar a nuestra habitación ya antes de dormir otra vez el espectáculo, aveces dormía con pijama, o alguna playera larga, pero en tiempo de calor que era mi favorito, se metía a la cama solo en tanga, era divino, más cuando las tangas eran de hilo, verla ahí acostada con el tremendo culote que tiene me hacía el hijo más feliz del mundo.
Al cumplir los 14 años me compro una cama mi mamá pues decía que ya estaba creciendo y pues debía tener mi espacio, yo medio resignando acepte pues aún estaría dentro de la misma habitación con ella.
En una ocasión dejando un poco de lado a mi mamá les contaré el por qué también inicie con el despertar sexual hacia mi abuela, pues resulta que un día salí de la escuela me fui directo a casa de un compañero de clases pues teníamos trabajo pendiente mi madre ya sabía esto así que no me esperaban, pero mi amigo tubo problemas de salud y me cancelo de última hora así que tuve que ir a casa, como no quería llegar y hacer labores en la casa me fui a esconder al granero donde se almacenaba la pastura de los animales ahí tenía un pequeño escondite entre las pacas de forraje, tenía en mi poder una revista de viejas encueradas (así decía mi abuela) y una tanga de mi mamá que llevaba en mi mochila así que la tarde pintaba bien.
Estaba escondido cuando escucho que alguien abría la puerta y guardé silencio, tenía una rendija por dónde observan quien entraba, eran mis abuelos.
Mi abuelo empezó a desnudar a mi abuela, le quitó el vestido y la dejo en calzones y brasier nada sexys pero aún así mi abuela no está nada mal, tremendas tetotas y que gran culo, el también se desnudo y mi abuela se inco para mamarle su verga, solo que por más que lo intento mi abuelo no pudo pararsele, yo obserbaba y así estuvieron unos minutos pero nada, mi abuela le dijo que tenía que tomarse la pastilla o así no se le pararía y el resignando se vistió y se salió del granero dejándola ahí.
Yo seguí observando mi abuela no se vistió al contrario se quitó el brasier, uyyy que enormes y ricas tetas tenía, después se quitó el calzón y por primera vez pude ver su vagina, era igual de gorda que la de mi mamá, de labios gruesos y carnosos pero está llevaba algo de pelos, mi abuela saco de entre sus ropas una especie de palo de madera y se lo metió en la vagina, mi abuela se estaba consolando ella sola se estaba masturbado, así estuvo unos 10 min, yo tenía la verga paradisima pero no podía moverme o haría ruido y me delataria.
En eso regreso mi abuelo, se quitó la ropa y ya traía su verga parada, nada extraordinario si me lo preguntan, lo que si es que la tenía bastante gorda, pues así como llego le saco el consolador a mi abuela del coño y le undio su estaca hasta el fondo.
Mi abuela gemía y se retorcía pero eso duró unos dos minutos mi abuelo se estaba corriendo en ella, se vistieron y ella se notaba molesta pero el muy animado, salieron y yo me quedé ahí recreando las imágenes, ayudado con mi revista y la tanga de mi mamá me hice una paja increíble.
A partir de ese día ya no pude ver a mi abuela con los mismos ojos, cada que la veía me la imaginaba desnuda, penetrando su rica cuca, mamandole sus tetas, poniéndola en posición de perrita para darle por su culo.
Justo al regresar a casa fue la primera que me encontré y le di una abrazo muy efusivo dónde mis manos se posaron en sus nalgas.
Abuela: uyyy hijo y ahora todo bien?
Yo: si abue solo me da gusto verte
No me dijo nada de que mis manos estaban en sus nalgas y seguí ahí abrazado a ella.
Volviendo con mi mamá, ya para esto tenía unos 15 años más o menos, temporada de calor en casa y el desfile de tangas, hilos y desnudos era cada noche en nuestra habitación, un día mientras ella salía de bañarse yo estaba ya bañado y listo en mi cama pero tenía que hacer algo para acercarme a mi mamá y se me ocurrió jugar con ella luchitas (como lucha libre) yo me puse solo un shorts sin nada más abajo y con uno que tenía una abertura al frente, ella salió en una toalla en el cuerpo y una en la cabeza, mientras se ponía crema yo empecé a molestarla, un empujoncito, le jale el cabello, me atreví a darle una nalgada y ella reaccionó.
Mamá: te voy a hacer cosquillas y no te Vaz a aguantar ehhh
Yo: jajaja ya no soy el niñito al que le podias ganar mamá ahora soy un hombre.
Yo seguí jugando con ella le hacía que la iba a golpear en forma de juego o a tirar al suelo.
Mamá: bueno bueno deja terminar de arreglarme y te demostrarte que aún puedo contigo niño.
La dejé un poco pues estaba buscando su ropa interior, aún tenía la toalla y yo quedé expectante para ver qué atuendo usaría para la pelea.
Uyyyyy y no me decepcionó, una tanga de hilo blanca, sin brassier.
Mamá: ven acá ya verás!!!
Comenzó a corretearme por la habitación para atraparme, su tetas rebotaban de un lado a otro y yo me deje agarrar, me tiro en su cama y yo de espaldas caí y ella sobre mi.
Sus tetas pasaban por mi cara, sus manos me hacían cosquillas en las costillas y piernas pero mis manos en lugar de defenderme se posaban en sus enormes nalgas, ella seguía en el juego de hacerme cosquillas pero mis dedos estaban entre sus nalgas, en un movimiento rápido mis yemas tocaron su anito, sentía el hilo de su tanga en medio de el y ahí puse mi dedo unos segundos, baje un poco y mis dedos pasaron por toda su vagina, mientras sus tetotas estaban en mi pecho.
Ella seguía ahí sobre mi.
Mamá: que? No te Vaz a defender?
Hice un movimiento rápido y la puse de espaldas a la cama, me retire un poco y ante mi sorpresa ella se quedó ahí tirada mirándome y abrió sus piernas, WOW su tanguita apenas tapaba con un triangulito de tela su vagina y sus tetas ahí ante mis ojos parecían invitarme a ir por ellos.
Ella me sonrió y su sonrisa era más de picardía que otra cosa y me lanze sobre ella, con mis manos la abrace quedando pegada a mi sus tetas apretadas por mi pecho y mi pelvis fue directo entre sus piernas, si no fuera por su tanga y mi shorts la hubiera penetrado hasta el fondo, mi boca le hacía cosquillas en el cuello y ella luchaba por soltarse pero sus movimientos solo hacían que nuestros sexos se rosaran más y más.
Ella luchaba por salirse de mi apretada llave de lucha jajaja y me estaba deleitando con su cuello y pecho pues mis manos la aprisionaban pero mi boca la devoraba lo más que podía.
Mamá: eso no se vale eres más fuerte que yo mi amor ya no eres el niñito que solía jugar conmigo.
Yo: ya te dije ahora soy un hombre.
Mamá: mi hombre?
Yo: si má, tu hombre.
La solté rápido y la voltee boca abajo, sin avisarle me subí sobre ella sus piernas ahora estában cerradas y las mías a sus costados, estaba literalmente sentado en sus nalgas.
Mis manos una en su nuca y la otra en su espalda.
Mamá: ohhh eso se siente rico!!!
Yo: ya no quieres jugar luchitas?
Mamá: mejor ya que estás ahí por qué no me das un masajito?
Yo: va mami pero con una condición!
Mamá: cuál?
Yo: que mañana volvamos a jugar luchitas!!!
Mamá: es un trato hijo. Ponme cremita y dame un buen masaje que estoy muerta del trabajo.
Me levanté a buscar la crema y mientras observé el manjar que estába ahí acostado solo en tanga de hilo lista para ser manoseada por mi...
Me monte sobre ella mis manos llenas de crema se posaron en su espalda y empecé a frotar.
Mamá: mmmm que rico hijo si que rico.
Seguí en su espalda y poco a poco fui pasando mi mano a sus costados, sus tetas aplastadas se salían por el borde de su cuerpo y mis dedos las tocaban y rosaban con el movimiento.
Mamá: uy mijo que rico.
Me puse más crema y está vez baje a sus cintura, me senté más abajo casi en sus pies y ahí estaba, su enorme culote, coronado con una tanguita de hilo, puse mis manos en su cintura y seguí con el masaje, un par de minutos y baje mis manos un poco y un poco más hasta que las tuve en sus nalgas, cada mano apretaba una de sus nalgotas.
Mamá: ahí ahí me duele un poquito.
Yo: déjame sobarte mami.
Mis manos se deleitaron con semejante culote, uyyy ya era descarado mi manoseo pero ella no me paraba.
Baje el ritmo y con calma fingiendo que daba masaje separe sus nalgotas, uy casi me vengo al ver su anito, una rosquita pequeñita, el hilo dental pasaba justo en medio de el y este parecía contraerse con la respiración de mi madre.
Mamá: Cres que es correcto estar viendo el anito de tu mamá?
Mi madre me saco del transe...
Yo: lo, lo siento mamita es que yo...
Mamá: tranquilo, ya lo viste, ya no tiene caso esconderlo.
Yo: puedo...verlo de nuevo?
Mamá: jamás me lo habías visto? Si la verdad?
Yo: no, no jamás lo juro.
Mamá: mira yo siempre te eh tenido mucha confianza mi amor, por eso ando pues en poca ropa o desnuda aquí en la habitación por qué creo que somos tu h yo contra el mundo, yo no tengo a Nadia más que a ti y tu debes saber que nunca nadie te amara tanto como yo y pues yo no quiero tener ningún secreto contigo, quieres verme todo, hasta mi ano, pues hazlo a mí no me molesta.
Esas fueron sus palabras y su cabeza se poso en la cama.
Yo no sabía que hacer, entiendan estaba aún muy morro para saber que eso era una señal así que pues mi mente lo estaba procesando.
Mamá: sigue con el masaje mi amor, ponme cremita ahí entre mis nalgas.
Tomé la crema y le puse en las nalgas, mis manos fueron por ellas y está vez las manosee a mí gusto y antojo.
Mamá: creo que ya es suficiente mi amor, quieres dar un último vistazo, separalas.
Ahí estaba de nuevo su lindo anito.
Mamá: ponle tantito cremita y sobalo con tus dedos.
No se ni como lo hice pues me parecía un sueño pero obedecía sin protestar.
Mis dedos se posaron en su anito y se lo sobe con crema.
Mamá: por encima mi amor ten cuidado si se pone muy resbaloso se me va a ir uno de tus deditos para adentro.
Yo: eso te dolería mamita?
Mamá: si, pero es rico.
Yo: lo intento?
Mamá: no, no, eso es algo que no debemos hacer entre yo y tú.
Mi mamá se levantó y me dejó ahí con mi erección a mil.
Mamá: ya es hora de dormir mañana continuaremos ok.
Vivo en un pueblo rural del estado de puebla llamado zaclatan, a las afueras mi abuelo tiene un rancho donde la actividad principal es la agricultura y la ganadería, describiré mi entorno familiar para que se den una idea.
Mi abuelo Ramón un viejo de 62 años, mi abuela Maria(Mary de cariño, o abuelita) de 59, mi madre Olga de 41 son los miembros de esta familia, tengo más tíos hijos de mis abuelos, 2 para ser exactos pero por ahora no interesan en la historia ya que no viven con nosotros.
Mi madre Olga fue madre soltera de mi a sus 20 años, un ingeniero agrónomo que vino hace muchos años con el afán de ayudar a los habitantes de este lugar la preñó y la olvidó aquí una vez que se fue sin saber jamás de el, mis abuelos pusieron el grito en el cielo pues como es posible que su única hija sería la burla del pueblo al tener un hijo sin marido, mi madre eso me cuenta, que después que yo nací pues las cosas cambiaron mis abuelos la aceptaron en su casa y al irse mis tios ella quedó a cargó de mis abuelos.
Bueno se que les interesará saber cómo son las protagonistas de esta historia, bueno empezaré con mi madre, es una mujer normal, mide 1:60 de estatura, unos 60 kilos pesará o bueno yo calculo eso pues no es ni gorda ni flaca, es de tez clara apiñonada cabello a media espalda negro y de cara muy hermosa, ya se lo que les interesa y trataré de ser lo más específico posible, unas tetas, enormes, grandes, gordas, ninguna playera, blusa, suéter o lo que se ponga le hacen el mérito que necesita, es muy tetota, usa en tiempos de calor unas blusas de tirantes de una tela fina que se pega a su cuerpo, me encanta esa época del año pues son variadas esas prendas de muchos colores blancas, negras, melón, gris, azul,etc y para rematar en ocasiones al andar en casa después de bañarse tiene la costumbre de no usar brasier, entonces sus pezones se dibujan en la tela y se ven increíbles, con las blusas blancas y un poco de suerte de que esté mojadita se notan sus aureolas marrones, me encantan, bueno como dije no es gorda pero si tiene algo de pancita, pero nada exagerado, acostumbra usar leggins o mayones muy pegados y le dibujan una pucha muy carnosa, tiene un papo muy gordito, sus piernas son firmes me encantan que se le marcan increíble con la ropa que usa y para terminar, su enorme culo, mi mamá tiene un culote, dos nalgotas grandes, duras, paraditas y si a eso le sumamos que todo el tiempo usa tangas, normales, colaless, de hilo, bueno imagínense la que sea ella las usa todas, como lo se? Pues por dos cosas, una por qué aveces dependiendo la ropa que use se le marcan o hasta se le ven por encima y dos, por qué las deja en el baño después de bañarse, así que las conozco todas, las eh tocado, me las eh restregado en la verga y se las eh enlechado en más de una ocasión.
Ahora mi abuela, es una mujer un poco más alta que mi madre 1:70 de complexión más robusta pues es algo gordita, al igual que mi madre tiene unas tetas enormes y un culo también bastante grande, no puedo describirlas igual pues mi abuela es más recatada, siempre usa faldas o vestidos pero nada fuera de lo normal para una señora de su edad siempre abajo de la rodilla y algo tapada si me lo preguntan aún así me eh puesto por ahí a espiar un poco y eh logrado verla en ropa interior, igual normal para su edad calzones enteros y brassieres grandes que cubren todo, medias en las piernas y no deja ver nada de piel, bueno después sabrán que eso cambio una vez que me la cogí pero por ahora así es ella.
Por último pues me toca describirme un poco para que me conozcan, soy algo de 1:80 moreno, de complexión fuerte pues el trabajo en el campo me ha tonificado el cuerpo, tengo sixpac o cuadritos en el estómago para que me entiendan, fuertes brazos y piernas duras, considero que tengo buena verga, 19 CM en erección total, soy teem carne así que en reposo está en unos 15cm, bastante gorda y cabezona, estoy sircunsidado así que tengo la cabeza expuesta, tengo poco bello aun así me gusta llevarla rasurada siempre que se puede para que se vea aún más imponente.
Bueno comenzaré contandoles que cuando era una más chico de unos 11 o 12 años más o menos yo aún dormía con mi mamá no solo en la misma habitación sino en la misma cama, mi madre siempre fue muy destapada en esa habitación nunca le dio pena conmigo pues les contaré que al llegar de la jornada de trabajo del campo ella entraba directo al baño toda la ropa que traía sucia iba directo al sesto antes de entrar a la regadera y podía verla pasear en el cuarto en brassier y tanga, aveces en pura tanga y si mi suerte era mejor aveces denuda, me encantaba eso pues ella siempre llevaba la vagina rasurada y para mí ver eso era la gloria, ya que salía del baño aveces en toalla enredada se la quitaba y así mojadita desnuda paseaba en el cuarto buscando su ropa interior o poniéndose sus cremas en el cuerpo, me encantaba verla ponerse una crema blanca por todo su cuerpo, entre sus tetas, su vientre, su panochota sus piernas, su culo, yo no perdia detalle aunque me tenía que hacer el loco en que estaba viendo TV o haciendo alguna tarea pero sin dejar de mirar el espectáculo.
Al terminar se ponía una bata o ropa de andar en casa pues bajaba a hacer la cena para mí y aveces para mis abuelos.
Al regresar a nuestra habitación ya antes de dormir otra vez el espectáculo, aveces dormía con pijama, o alguna playera larga, pero en tiempo de calor que era mi favorito, se metía a la cama solo en tanga, era divino, más cuando las tangas eran de hilo, verla ahí acostada con el tremendo culote que tiene me hacía el hijo más feliz del mundo.
Al cumplir los 14 años me compro una cama mi mamá pues decía que ya estaba creciendo y pues debía tener mi espacio, yo medio resignando acepte pues aún estaría dentro de la misma habitación con ella.
En una ocasión dejando un poco de lado a mi mamá les contaré el por qué también inicie con el despertar sexual hacia mi abuela, pues resulta que un día salí de la escuela me fui directo a casa de un compañero de clases pues teníamos trabajo pendiente mi madre ya sabía esto así que no me esperaban, pero mi amigo tubo problemas de salud y me cancelo de última hora así que tuve que ir a casa, como no quería llegar y hacer labores en la casa me fui a esconder al granero donde se almacenaba la pastura de los animales ahí tenía un pequeño escondite entre las pacas de forraje, tenía en mi poder una revista de viejas encueradas (así decía mi abuela) y una tanga de mi mamá que llevaba en mi mochila así que la tarde pintaba bien.
Estaba escondido cuando escucho que alguien abría la puerta y guardé silencio, tenía una rendija por dónde observan quien entraba, eran mis abuelos.
Mi abuelo empezó a desnudar a mi abuela, le quitó el vestido y la dejo en calzones y brasier nada sexys pero aún así mi abuela no está nada mal, tremendas tetotas y que gran culo, el también se desnudo y mi abuela se inco para mamarle su verga, solo que por más que lo intento mi abuelo no pudo pararsele, yo obserbaba y así estuvieron unos minutos pero nada, mi abuela le dijo que tenía que tomarse la pastilla o así no se le pararía y el resignando se vistió y se salió del granero dejándola ahí.
Yo seguí observando mi abuela no se vistió al contrario se quitó el brasier, uyyy que enormes y ricas tetas tenía, después se quitó el calzón y por primera vez pude ver su vagina, era igual de gorda que la de mi mamá, de labios gruesos y carnosos pero está llevaba algo de pelos, mi abuela saco de entre sus ropas una especie de palo de madera y se lo metió en la vagina, mi abuela se estaba consolando ella sola se estaba masturbado, así estuvo unos 10 min, yo tenía la verga paradisima pero no podía moverme o haría ruido y me delataria.
En eso regreso mi abuelo, se quitó la ropa y ya traía su verga parada, nada extraordinario si me lo preguntan, lo que si es que la tenía bastante gorda, pues así como llego le saco el consolador a mi abuela del coño y le undio su estaca hasta el fondo.
Mi abuela gemía y se retorcía pero eso duró unos dos minutos mi abuelo se estaba corriendo en ella, se vistieron y ella se notaba molesta pero el muy animado, salieron y yo me quedé ahí recreando las imágenes, ayudado con mi revista y la tanga de mi mamá me hice una paja increíble.
A partir de ese día ya no pude ver a mi abuela con los mismos ojos, cada que la veía me la imaginaba desnuda, penetrando su rica cuca, mamandole sus tetas, poniéndola en posición de perrita para darle por su culo.
Justo al regresar a casa fue la primera que me encontré y le di una abrazo muy efusivo dónde mis manos se posaron en sus nalgas.
Abuela: uyyy hijo y ahora todo bien?
Yo: si abue solo me da gusto verte
No me dijo nada de que mis manos estaban en sus nalgas y seguí ahí abrazado a ella.
Volviendo con mi mamá, ya para esto tenía unos 15 años más o menos, temporada de calor en casa y el desfile de tangas, hilos y desnudos era cada noche en nuestra habitación, un día mientras ella salía de bañarse yo estaba ya bañado y listo en mi cama pero tenía que hacer algo para acercarme a mi mamá y se me ocurrió jugar con ella luchitas (como lucha libre) yo me puse solo un shorts sin nada más abajo y con uno que tenía una abertura al frente, ella salió en una toalla en el cuerpo y una en la cabeza, mientras se ponía crema yo empecé a molestarla, un empujoncito, le jale el cabello, me atreví a darle una nalgada y ella reaccionó.
Mamá: te voy a hacer cosquillas y no te Vaz a aguantar ehhh
Yo: jajaja ya no soy el niñito al que le podias ganar mamá ahora soy un hombre.
Yo seguí jugando con ella le hacía que la iba a golpear en forma de juego o a tirar al suelo.
Mamá: bueno bueno deja terminar de arreglarme y te demostrarte que aún puedo contigo niño.
La dejé un poco pues estaba buscando su ropa interior, aún tenía la toalla y yo quedé expectante para ver qué atuendo usaría para la pelea.
Uyyyyy y no me decepcionó, una tanga de hilo blanca, sin brassier.
Mamá: ven acá ya verás!!!
Comenzó a corretearme por la habitación para atraparme, su tetas rebotaban de un lado a otro y yo me deje agarrar, me tiro en su cama y yo de espaldas caí y ella sobre mi.
Sus tetas pasaban por mi cara, sus manos me hacían cosquillas en las costillas y piernas pero mis manos en lugar de defenderme se posaban en sus enormes nalgas, ella seguía en el juego de hacerme cosquillas pero mis dedos estaban entre sus nalgas, en un movimiento rápido mis yemas tocaron su anito, sentía el hilo de su tanga en medio de el y ahí puse mi dedo unos segundos, baje un poco y mis dedos pasaron por toda su vagina, mientras sus tetotas estaban en mi pecho.
Ella seguía ahí sobre mi.
Mamá: que? No te Vaz a defender?
Hice un movimiento rápido y la puse de espaldas a la cama, me retire un poco y ante mi sorpresa ella se quedó ahí tirada mirándome y abrió sus piernas, WOW su tanguita apenas tapaba con un triangulito de tela su vagina y sus tetas ahí ante mis ojos parecían invitarme a ir por ellos.
Ella me sonrió y su sonrisa era más de picardía que otra cosa y me lanze sobre ella, con mis manos la abrace quedando pegada a mi sus tetas apretadas por mi pecho y mi pelvis fue directo entre sus piernas, si no fuera por su tanga y mi shorts la hubiera penetrado hasta el fondo, mi boca le hacía cosquillas en el cuello y ella luchaba por soltarse pero sus movimientos solo hacían que nuestros sexos se rosaran más y más.
Ella luchaba por salirse de mi apretada llave de lucha jajaja y me estaba deleitando con su cuello y pecho pues mis manos la aprisionaban pero mi boca la devoraba lo más que podía.
Mamá: eso no se vale eres más fuerte que yo mi amor ya no eres el niñito que solía jugar conmigo.
Yo: ya te dije ahora soy un hombre.
Mamá: mi hombre?
Yo: si má, tu hombre.
La solté rápido y la voltee boca abajo, sin avisarle me subí sobre ella sus piernas ahora estában cerradas y las mías a sus costados, estaba literalmente sentado en sus nalgas.
Mis manos una en su nuca y la otra en su espalda.
Mamá: ohhh eso se siente rico!!!
Yo: ya no quieres jugar luchitas?
Mamá: mejor ya que estás ahí por qué no me das un masajito?
Yo: va mami pero con una condición!
Mamá: cuál?
Yo: que mañana volvamos a jugar luchitas!!!
Mamá: es un trato hijo. Ponme cremita y dame un buen masaje que estoy muerta del trabajo.
Me levanté a buscar la crema y mientras observé el manjar que estába ahí acostado solo en tanga de hilo lista para ser manoseada por mi...
Me monte sobre ella mis manos llenas de crema se posaron en su espalda y empecé a frotar.
Mamá: mmmm que rico hijo si que rico.
Seguí en su espalda y poco a poco fui pasando mi mano a sus costados, sus tetas aplastadas se salían por el borde de su cuerpo y mis dedos las tocaban y rosaban con el movimiento.
Mamá: uy mijo que rico.
Me puse más crema y está vez baje a sus cintura, me senté más abajo casi en sus pies y ahí estaba, su enorme culote, coronado con una tanguita de hilo, puse mis manos en su cintura y seguí con el masaje, un par de minutos y baje mis manos un poco y un poco más hasta que las tuve en sus nalgas, cada mano apretaba una de sus nalgotas.
Mamá: ahí ahí me duele un poquito.
Yo: déjame sobarte mami.
Mis manos se deleitaron con semejante culote, uyyy ya era descarado mi manoseo pero ella no me paraba.
Baje el ritmo y con calma fingiendo que daba masaje separe sus nalgotas, uy casi me vengo al ver su anito, una rosquita pequeñita, el hilo dental pasaba justo en medio de el y este parecía contraerse con la respiración de mi madre.
Mamá: Cres que es correcto estar viendo el anito de tu mamá?
Mi madre me saco del transe...
Yo: lo, lo siento mamita es que yo...
Mamá: tranquilo, ya lo viste, ya no tiene caso esconderlo.
Yo: puedo...verlo de nuevo?
Mamá: jamás me lo habías visto? Si la verdad?
Yo: no, no jamás lo juro.
Mamá: mira yo siempre te eh tenido mucha confianza mi amor, por eso ando pues en poca ropa o desnuda aquí en la habitación por qué creo que somos tu h yo contra el mundo, yo no tengo a Nadia más que a ti y tu debes saber que nunca nadie te amara tanto como yo y pues yo no quiero tener ningún secreto contigo, quieres verme todo, hasta mi ano, pues hazlo a mí no me molesta.
Esas fueron sus palabras y su cabeza se poso en la cama.
Yo no sabía que hacer, entiendan estaba aún muy morro para saber que eso era una señal así que pues mi mente lo estaba procesando.
Mamá: sigue con el masaje mi amor, ponme cremita ahí entre mis nalgas.
Tomé la crema y le puse en las nalgas, mis manos fueron por ellas y está vez las manosee a mí gusto y antojo.
Mamá: creo que ya es suficiente mi amor, quieres dar un último vistazo, separalas.
Ahí estaba de nuevo su lindo anito.
Mamá: ponle tantito cremita y sobalo con tus dedos.
No se ni como lo hice pues me parecía un sueño pero obedecía sin protestar.
Mis dedos se posaron en su anito y se lo sobe con crema.
Mamá: por encima mi amor ten cuidado si se pone muy resbaloso se me va a ir uno de tus deditos para adentro.
Yo: eso te dolería mamita?
Mamá: si, pero es rico.
Yo: lo intento?
Mamá: no, no, eso es algo que no debemos hacer entre yo y tú.
Mi mamá se levantó y me dejó ahí con mi erección a mil.
Mamá: ya es hora de dormir mañana continuaremos ok.
3 comentarios - Madre y abuela, mi historia.