Hacía pocas noches que yo me había mudado definitivamente a la casilla de mi turra. Con la Confirmación del embarazo y la bendición que se nos venía encima y como ya conté en otros relatos me mudé a la casilla de mi turra cambiando Completamente mi vida. Noches que me llamaron la atención Hubo miles de hecho días y tardes también La idea es contarlas todas y esta fue una de ellas
Como me pidieron mucho por mensaje Voy a tratar de poner todos los detalles posibles.
La pieza me dormíamos vos con Jesi era muy chiquita calurosa y mal construida. Había detalles por todos lados incluso faltaban algunas uniones con el techo que hacía entrar viento y agua en caso de que lloviera. Pero esto a las turras no le afectaban absolutamente nada. Pareja será lo más normal del mundo y no solo eso sino que era preferible pagar la cuota del equipo de música para poner la cumbia todo lo que da que terminar de arreglar la pieza. Con mi turra teníamos una cama medio desvencijada y rota, a dos metros nuestro estaba la cama de mi cuñada y contra la otra pared la cama de mi otra cuñadita.
La calentura se te apoderaba rápido de la cabeza porque ya en la pieza tanto Jesi como mis cuñaditas andaban en tanga hilito como si nada. Entraban a la pieza se sacaban la calza el short o La pollera Y se quedaban con la tanguita hilito. de repente tenía 3 colas perfectas entangadas delante mío. yo calentón como fui siempre no podía disimular que se me parara la pija. francamente es imposible. ver esos hilitos marcando bien esas conchas carnosas. esas colas redondas paraditas. te volaban la cabeza mal.
Recuerden que Jesi estaba embarazada por lo tanto quería pija todo el día todo el tiempo. Ni modo que sin importarnos absolutamente nada de mis cuñaditas debajo de la sábana y empezábamos a chapar.
Esa noche los besos eran intensos pasionales mi verga dura y parada chocaba contra la pancita de mi turra. En pocos segundos estábamos completamente desnudos los dos. Mi turra se me subió encima y comenzó a cabalgarme. mi pija entro hasta el fondo de su concha obviamente sin forro piel con piel. Mientras mi turra gemía a mí me volvía loco el saber que estábamos garchando a escasos metros de mis cuñadas que estaban despiertas. Esa belleza hermosa de mi turra que ni siquiera esperar a que sus hermanas se duerman. Ella quería pija y Era lo único que importaba.
Mientras me cabalgaba la sábana se iba corriendo y en pocos minutos sus tetas y su panza de embarazada quedaban al descubierto mientras me saltaba sobre mi pija dura parada y cabezona. Le importaba volver a taparse estaba enloquesida con mi pija. Mis cuñaditas despiertas tenía básicamente en vivo una clase de sexo gratis. Al parecer aprendieron bastante rápido.
Después de que mi turra acabara y mientras me seguía saltando como loba en celo por llenarle la concha de leche. Nos quedamos dándonos unos ricos besos hasta que mi turra completamente desnuda se limpió la concha con la sábana dejándola todavía más flujeada y se acostó a dormir.
Para mí dormir no era una tarea fácil. Y es que sobre todo después de acabar y al bajar la calentura todos esos detalles de la vida turra aparecían de repente. Esa noche en particular habia bastantes mosquitos y como nadie había ido a comprar espiral básicamente había que aguantar. Una de mis cuñaditas roncaba bastante y para peor el viento golpea una chapa. Todas las cosas que por supuesto ni mosqueaban a miturra que ya dormía con su Conchita llena de leche desnuda y en su panza nuestro primer hijo. Mi cuñaditas en tangadas dormían cada uno en su cama. Ay me resultaba difícil hasta dormirme sin bañarme después de garchar. Transpirado sucio.
Después de estar como una hora dando vueltas en la cama decidí por lo menos ir a limpiarme un poco la pija al baño. Y es que todavía en ese momento mi transición aturro iba paso a paso. Hoy terminamos de garchar Con Jesi y no me importa absolutamente nada así sucios como estamos nos quedamos dormidos cucharita.
La cuestión es que salí de la pieza completamente desnudo Camino hacia el baño. Cuando me arrime a la puerta del baño se escuchaban gemidos de placer. La luz estaba apagada pero se escuchaba una hembra gemir como loca. Esa hembra era claramente mi suegra. Como la puerta estaba entreabierta y con apenas un Rayito de luz que llegaba desde la otra pieza pude ver en el suelo un Body negro transparente muy sexy que pertenecía a mi suegra. Yo se lo había visto puesto y le queda un espectáculo luciendo esas enormes y hermosas tetas.
Escuchar los gemidos de mi suegra hicieron que se me olvidara absolutamente todos los detalles de no poder dormir en el mundo turro. Rápidamente y con cada gemido la pija se me iba poniendo más y más dura. Mil cosas pasaron por mi cabeza en un momento. La admiración por la familia de mi turra, la belleza de tener una suegra garchando baño la locura Y la calentura de estar del otro lado de la puerta cómo le metían verga. Además la pregunta de Por qué estaría garchando en el baño teniendo su pieza. Eso es arte.
Me quedé 10 minutos más o menos escuchando los gemidos de mi suegra. Eran intensos calientes te daba cuenta que le estaban metiendo la pija a más no poder. No trataba de disimularlos ni nada simplemente disfrutaba y se dejaba llevar. Para mi suerte y como en casi todas las familias turras las madres son muy jóvenes. Aquella noche mi suegra debería tener apenas unos años más que yo ahora lo que hacía que quisiera pija todo el tiempo. Una auténtica hembra villera de las de antes. Las de la minifalda de jean cortita al ras de la cola la de los escotes las que se dividían entre la fanática de Pablito lescano y la fanáticas de los pibes chorros (mi suegra es la fanática de los pibes chorros) las que tenían seis o siete hijos y le echaban la culpa al estado de no poder darles todo. la que toman vino y cerveza y se ponen en pedo en todos los cumples y fiestas de fin de año. la auténtica turra madre que por más que fuera abuela seguía llendo al baile y garchando como de pendeja.
No iba a desperdiciar la oportunidad y por lo menos mirar un poquito ver cómo era la reacción cuando yo cruzara la puerta.
De modo que Aprovechando que la luz estaba apagada Abrí la puerta entrando al baño. No llegué a prender la luz pero era suficiente con la que venía de la otra pieza para iluminar la maravillosa escena. Mi suegra completamente desnuda apoyada con sus manos en la pared de ladrillo hueco sin revocar con la cola bien apuntando hacia afuera siendo penetrada garchada por un turro bastante más joven que ella completamente tatuado y obviamente todo desnudo. Sus ropas estaban en el piso. Las enormes tetas de mi suegra bailaban con cada embestida. El pendejo turro al que seguramente mi suegra había conocido esa misma noche se la estaba garchando sin forro.
Lo más caliente de todo es que no hubo ninguna escena de alteración y sorpresa porque yo hubiera abierto la puerta mientras ellos estaban garchando. Simplemente mi suegra giró un poco la cabeza mientras el turro le seguía dando pija me miró y me dijo: "ke kere nene toi re garchando anda a mear al patio". Volvió a girar la cabeza y siguió recibiendo la pija de su turro que en ningún momento dejó de garcharla. Obviamente me retiré de la escena pero con una calentura nivel 1000. Ya con la pija completamente dura y parada volví hacia la pieza de mi turra.
Una vez en la cama le apoye la verga completamente parada en su colita redonda y firme y con mi mano comencé a acariciarle las tetas.
Mi turra se despertó y como si la noche no estuviera cargada con frases calientes me dijo: ay papito komo ta esa verga metemela toda
Yo le pegué flor de ensartada. le metí la verga dura y parada hasta el fondo de su concha. Mi turra comenzó a gemir de placer mientras en esa posición cucharita yo le daba pija sin parar. Mientras ella gemía yo acariciaba sus tetas y le decía cosas al oído. Mi turra estaba como loca. Rápidamente sus gemidos se intensificaron se hicieron más fuertes para transformarse en pequeños gritos de placer. Más pija le daba y esa más gritaba. era una loba en celo gritando. Ya no eran pequeños gritos eran aullidos de placer. Una de mis cuñaditas se despertó por los gritos y para seguir cargando la noche dijo: ay q concha caliente q SOS e. no me deja dormir zorra
a lo que mi turra sin importarle nada le respondió: déjame culear tranquila pendeja de mierda.
Con toda esa calentura a cuestas simplemente Me dediqué a disfrutar la vida maravillosa en la que me había Unido. Habremos estado garchando un buen tiempo con mi turra gimiendo como una puta y mi cuñadita sin poder dormir.
Jessi volvió a subirse encima mío y empezar a cabalgarme como loca. Me saltaba encima me destrozaba la pija. No solamente eso sino que gritaba con más fuerzas y de Cara a la cama donde mi cuñadita no podía dormir. Para ese momento Ninguna de mis dos cuñadidas podría dormir. Yo volaba de calentura. El flujo de la concha de mi turra resbalaba mi pija que garchábamos sin forro piel con piel. Como buena turra embarazada Jessi acabó dos veces flujeándome todo. Llenándole la concha de leche más no poder. Ya deberían de ser como a las 5 de la mañana. No habíamos dormido nada Pero sinceramente poco importaba porque éramos turros y al otro día no teníamos nada que hacer más que tomar mates en la casilla y dejar pasar la vida riéndonos de los Chetos pelotudos.
Imágenes ilustratibas
Como me pidieron mucho por mensaje Voy a tratar de poner todos los detalles posibles.
La pieza me dormíamos vos con Jesi era muy chiquita calurosa y mal construida. Había detalles por todos lados incluso faltaban algunas uniones con el techo que hacía entrar viento y agua en caso de que lloviera. Pero esto a las turras no le afectaban absolutamente nada. Pareja será lo más normal del mundo y no solo eso sino que era preferible pagar la cuota del equipo de música para poner la cumbia todo lo que da que terminar de arreglar la pieza. Con mi turra teníamos una cama medio desvencijada y rota, a dos metros nuestro estaba la cama de mi cuñada y contra la otra pared la cama de mi otra cuñadita.
La calentura se te apoderaba rápido de la cabeza porque ya en la pieza tanto Jesi como mis cuñaditas andaban en tanga hilito como si nada. Entraban a la pieza se sacaban la calza el short o La pollera Y se quedaban con la tanguita hilito. de repente tenía 3 colas perfectas entangadas delante mío. yo calentón como fui siempre no podía disimular que se me parara la pija. francamente es imposible. ver esos hilitos marcando bien esas conchas carnosas. esas colas redondas paraditas. te volaban la cabeza mal.
Recuerden que Jesi estaba embarazada por lo tanto quería pija todo el día todo el tiempo. Ni modo que sin importarnos absolutamente nada de mis cuñaditas debajo de la sábana y empezábamos a chapar.
Esa noche los besos eran intensos pasionales mi verga dura y parada chocaba contra la pancita de mi turra. En pocos segundos estábamos completamente desnudos los dos. Mi turra se me subió encima y comenzó a cabalgarme. mi pija entro hasta el fondo de su concha obviamente sin forro piel con piel. Mientras mi turra gemía a mí me volvía loco el saber que estábamos garchando a escasos metros de mis cuñadas que estaban despiertas. Esa belleza hermosa de mi turra que ni siquiera esperar a que sus hermanas se duerman. Ella quería pija y Era lo único que importaba.
Mientras me cabalgaba la sábana se iba corriendo y en pocos minutos sus tetas y su panza de embarazada quedaban al descubierto mientras me saltaba sobre mi pija dura parada y cabezona. Le importaba volver a taparse estaba enloquesida con mi pija. Mis cuñaditas despiertas tenía básicamente en vivo una clase de sexo gratis. Al parecer aprendieron bastante rápido.
Después de que mi turra acabara y mientras me seguía saltando como loba en celo por llenarle la concha de leche. Nos quedamos dándonos unos ricos besos hasta que mi turra completamente desnuda se limpió la concha con la sábana dejándola todavía más flujeada y se acostó a dormir.
Para mí dormir no era una tarea fácil. Y es que sobre todo después de acabar y al bajar la calentura todos esos detalles de la vida turra aparecían de repente. Esa noche en particular habia bastantes mosquitos y como nadie había ido a comprar espiral básicamente había que aguantar. Una de mis cuñaditas roncaba bastante y para peor el viento golpea una chapa. Todas las cosas que por supuesto ni mosqueaban a miturra que ya dormía con su Conchita llena de leche desnuda y en su panza nuestro primer hijo. Mi cuñaditas en tangadas dormían cada uno en su cama. Ay me resultaba difícil hasta dormirme sin bañarme después de garchar. Transpirado sucio.
Después de estar como una hora dando vueltas en la cama decidí por lo menos ir a limpiarme un poco la pija al baño. Y es que todavía en ese momento mi transición aturro iba paso a paso. Hoy terminamos de garchar Con Jesi y no me importa absolutamente nada así sucios como estamos nos quedamos dormidos cucharita.
La cuestión es que salí de la pieza completamente desnudo Camino hacia el baño. Cuando me arrime a la puerta del baño se escuchaban gemidos de placer. La luz estaba apagada pero se escuchaba una hembra gemir como loca. Esa hembra era claramente mi suegra. Como la puerta estaba entreabierta y con apenas un Rayito de luz que llegaba desde la otra pieza pude ver en el suelo un Body negro transparente muy sexy que pertenecía a mi suegra. Yo se lo había visto puesto y le queda un espectáculo luciendo esas enormes y hermosas tetas.
Escuchar los gemidos de mi suegra hicieron que se me olvidara absolutamente todos los detalles de no poder dormir en el mundo turro. Rápidamente y con cada gemido la pija se me iba poniendo más y más dura. Mil cosas pasaron por mi cabeza en un momento. La admiración por la familia de mi turra, la belleza de tener una suegra garchando baño la locura Y la calentura de estar del otro lado de la puerta cómo le metían verga. Además la pregunta de Por qué estaría garchando en el baño teniendo su pieza. Eso es arte.
Me quedé 10 minutos más o menos escuchando los gemidos de mi suegra. Eran intensos calientes te daba cuenta que le estaban metiendo la pija a más no poder. No trataba de disimularlos ni nada simplemente disfrutaba y se dejaba llevar. Para mi suerte y como en casi todas las familias turras las madres son muy jóvenes. Aquella noche mi suegra debería tener apenas unos años más que yo ahora lo que hacía que quisiera pija todo el tiempo. Una auténtica hembra villera de las de antes. Las de la minifalda de jean cortita al ras de la cola la de los escotes las que se dividían entre la fanática de Pablito lescano y la fanáticas de los pibes chorros (mi suegra es la fanática de los pibes chorros) las que tenían seis o siete hijos y le echaban la culpa al estado de no poder darles todo. la que toman vino y cerveza y se ponen en pedo en todos los cumples y fiestas de fin de año. la auténtica turra madre que por más que fuera abuela seguía llendo al baile y garchando como de pendeja.
No iba a desperdiciar la oportunidad y por lo menos mirar un poquito ver cómo era la reacción cuando yo cruzara la puerta.
De modo que Aprovechando que la luz estaba apagada Abrí la puerta entrando al baño. No llegué a prender la luz pero era suficiente con la que venía de la otra pieza para iluminar la maravillosa escena. Mi suegra completamente desnuda apoyada con sus manos en la pared de ladrillo hueco sin revocar con la cola bien apuntando hacia afuera siendo penetrada garchada por un turro bastante más joven que ella completamente tatuado y obviamente todo desnudo. Sus ropas estaban en el piso. Las enormes tetas de mi suegra bailaban con cada embestida. El pendejo turro al que seguramente mi suegra había conocido esa misma noche se la estaba garchando sin forro.
Lo más caliente de todo es que no hubo ninguna escena de alteración y sorpresa porque yo hubiera abierto la puerta mientras ellos estaban garchando. Simplemente mi suegra giró un poco la cabeza mientras el turro le seguía dando pija me miró y me dijo: "ke kere nene toi re garchando anda a mear al patio". Volvió a girar la cabeza y siguió recibiendo la pija de su turro que en ningún momento dejó de garcharla. Obviamente me retiré de la escena pero con una calentura nivel 1000. Ya con la pija completamente dura y parada volví hacia la pieza de mi turra.
Una vez en la cama le apoye la verga completamente parada en su colita redonda y firme y con mi mano comencé a acariciarle las tetas.
Mi turra se despertó y como si la noche no estuviera cargada con frases calientes me dijo: ay papito komo ta esa verga metemela toda
Yo le pegué flor de ensartada. le metí la verga dura y parada hasta el fondo de su concha. Mi turra comenzó a gemir de placer mientras en esa posición cucharita yo le daba pija sin parar. Mientras ella gemía yo acariciaba sus tetas y le decía cosas al oído. Mi turra estaba como loca. Rápidamente sus gemidos se intensificaron se hicieron más fuertes para transformarse en pequeños gritos de placer. Más pija le daba y esa más gritaba. era una loba en celo gritando. Ya no eran pequeños gritos eran aullidos de placer. Una de mis cuñaditas se despertó por los gritos y para seguir cargando la noche dijo: ay q concha caliente q SOS e. no me deja dormir zorra
a lo que mi turra sin importarle nada le respondió: déjame culear tranquila pendeja de mierda.
Con toda esa calentura a cuestas simplemente Me dediqué a disfrutar la vida maravillosa en la que me había Unido. Habremos estado garchando un buen tiempo con mi turra gimiendo como una puta y mi cuñadita sin poder dormir.
Jessi volvió a subirse encima mío y empezar a cabalgarme como loca. Me saltaba encima me destrozaba la pija. No solamente eso sino que gritaba con más fuerzas y de Cara a la cama donde mi cuñadita no podía dormir. Para ese momento Ninguna de mis dos cuñadidas podría dormir. Yo volaba de calentura. El flujo de la concha de mi turra resbalaba mi pija que garchábamos sin forro piel con piel. Como buena turra embarazada Jessi acabó dos veces flujeándome todo. Llenándole la concha de leche más no poder. Ya deberían de ser como a las 5 de la mañana. No habíamos dormido nada Pero sinceramente poco importaba porque éramos turros y al otro día no teníamos nada que hacer más que tomar mates en la casilla y dejar pasar la vida riéndonos de los Chetos pelotudos.
Imágenes ilustratibas
3 comentarios - Mi suegra: ke kere pibe estoy garchando