Llego la tercera parte, gracias a todos por los puntos y los comentarios. Todavia no termina, falta un poco mas, asi que esperen la parte 4.
El dia deescuela no pudo ir peor… tenia la cabeza en cualquier lado, estaba nervioso,solo pensaba en que le iba a decir cuando me pida de hablar. Cuando llego lahora de salir, me fui a casa caminando mas lento que de costumbre, de a ratospensaba en no ir a mi casa, pero adonde iba a ir? Me aliviaba un poco el hechode pensar que ella no llegaba hasta mas tarde. Millones de cosas se me cruzabanen mi cabeza, y de repente estaba parado frente a la entrada al departamento,de tan nervioso y tantas cosas que estaba pensando no me di cuenta de como llegue.
No teniahambre, asi que pase de largo el almuerzo, sentía que las tripas eran piedras,me tire a mirar televisión y navegar en el celu, charle con unos amigos, perosiempre pensando en la charla que tendría… pasaron las horas y llego mi mamá…me quede otra vez sin palabras, solo pude decir
Yo – Hola má..todo bien?
Mamá – Si,todo bien. A vos como te fue? Pone el agua asi tomamos unos mates y charlamosun poco.
Yo – Si má.
Estabahecho un boludo, no podía decir mas nada, no me salían las palabras, y que mediga que íbamos a charlar me hizo poner mas nervioso, ella se fue al baño y acambiarse y yo me fui a la cocina, en unos minutos tenia todo listo, lleve alliving y me sente el sillón, comencé a cebar un mate y apareció ella, se sentofrente a mi y de una fue al asunto directamente, creo que quizás también ledaba nervios y para no dar muchas vueltas tiro todo enseguida.
Mamá –primero quiero pedirte perdón por haber entrado a tu habitación asi de golpe,ya no sos un nene y mereces tener tu privacidad. Con tu edad ya sabes que esoque estabas haciendo es perfectamente normal para los varones, no sos elprimero ni el ultimo que lo hace, y la edad tampoco es un impedimento. Además tambiénentiendo que estamos lejos de casa, en otro país, otro idioma, otra cultura, ypor ahí se te hace difícil conocer chicas de tu edad, y tampoco me gustaría quetengas relaciones con alguna chica de aca y que por un descuido termines conalguna enfermedad o con un embarazo.
Al escucharestas palabras me sentí un poco aliviado, seguía cebando mates y todavía nosabia que decir.
Mamá – Lo únicoque voy a decirte es que vi algo que mellamó la atención, y estaba sospechando que algo pasaba… tenias una bombachamía mientras lo hacias.
Ahí se meparo el mundo, creo que me puse palido… sentía que el corazón me latia a milpor hora y que se me iba a salir, creo que jamas estuve tan nervioso en mivida.
Mamá – no seque estaras pensando, pero me gustaría que me lo cuentes.
Yo – es que….Que… que…
Y no supeque decir, deje todo y me fui a mi habitación, cerre la puerta y me quede en lacama.
Ella vinoal minuto a mi habitación, entro, se sento a mi lado y me dijo
Mamá – no esque lo haya tomado mal, tampoco quiero retarte y mucho menos que pienses que meenoje con vos por lo que hiciste, solo dije que me llamo la atención y quisierasaber que te llevo a hacer eso.
Yo – perdónma, no se que pensaba… solo fue una idiotez que se me cruzo por la cabeza y lohice.
Mamá – no estesafligido, no me enojo con vos. Tampoco es la primera vez que lo hacias, verdad?
En esemomento no sabia si confesar, tenia miedo que si lo hacia se iba a enojar, peroalgo adentro me decía que ya estaba, me descubrió, y si le decía que no iba apensar que si lo había miles de veces
Yo – no, nofue la primera vez, fueron varias, no se. Fue una idiotez, y ahora me sientomuy mal.
Mamá – estabien hijo, no te pongas asi, ya esta, te dije que no me enoje con vos, yentiendo que no tenes mucho contacto con mujeres, por eso no puedo enojarme,esta bien? Ya esta, ya paso, es perfectamente normal que sientas deseos. Ahora yame siento mejor de que lo hablamos, espero que vos también. Y me sientoculpable de haber interrumpido en la intimidad de tu cuarto.
Yo – en seriono estas enojada?
Mamá – no,para nada hijo, solo que me llamo la atención que tenias mi bombacha, pero yaesta, no te sientas mal por eso.
Yo – pensé quete ibas a enojar y mucho… por eso estaba nervioso y me levante del sillón y mevine al cuarto.
Mamá –bueno, ya esta, si queres volver a seguir tomando mates y charlamos un poco decomo están tus cosas, me encantaría, y si en algún momento me queres contar lode la bombacha, queda en vos.
Me levante,fuimos al living, y charlamos bastante de las cosas de la vida, pero no me salíacontarle que me exitaba usar sus bombachas para pajearme. Esos días posteriores,debe haber sido de los nervios de la situación, que no sentía calentura. No teniaganas de pajearme. No se si habran pasado 4 o 5 dias, hasta que me empezó asubir otra vez la libido, nadie puede luchar contra eso… me levante una mañanamuy caliente y con la pija dura, ese dia estuve todo el dia pensando en sexo,en pornografía, en hacerme la paja. Y también pensé en buscar una bombacha demamá.
Llego lanoche, cenamos y nos pusimos a ver una peli, en un momento empezaron unasescenas de sexo, no explicito pero se veian algunas imágenes de la mujer entetas, y como se besaban y cogían, solo de lejos como cualquier película noporno. En ese momento ella me miro fijamente como queriendo decir algo, como sicon esto yo me iba a ir a pajear a mi cuarto… la mire y me calente…
Mamá – que momentoincomodo, creo que voy a cambiar de canal, no es por nada, pero por lo queestuvimos viviendo hace poco, siento que tendríamos que ver otra cosa.
Yo – si…bastante incomodo para los dos.
Pero nocambio de canal, y a la vez me sentía tan caliente que casi no pensaba…
Yo – quieropedirte perdón de nuevo má, por lo que hice el otro dia, se que estuve mal,pero bueno, estaba muy….
Y me quedesin palabras.
Mamá – estabien, no pasa nada… y muy caliente es lo que estabas, decilo, sin miedo.
Yo – si…muy caliente. Por eso hice lo que hice.
Mamá – lo queestabas haciendo o lo de la bombacha?
Yo – las doscosas… y bueno, si queres saber…
La calenturame seguía ganando y decidi a contarle todo
Mamá – me gustaría,pero no quiero que te pongas mal
Yo – bueno má,lo primero es que si, se que no estuve para nada bien, y de nuevo te pidodisculpas. Pero sos la única mujer con la que estoy compartiendo el tiempo, ylo que hice fue porque sentir el olor de tu ropa interior me hizo experimentaralgo raro, muy lindo, nunca me había pasado.
Mamá –guau. Nunca me hubiera imaginado que podía pasar eso, pensaba que era algoasqueroso lo que hacias, oler una bombacha, no me deja de parecer raro…
Yo – si,por eso, perdón… cuando me descubriste me sentí muy mal, y bueno, prometo novolverlo a hacer.
Mamá – no sesi te diste cuenta, pero estoy teniendo cuidado de no dejar mas ropa interioren el cesto de ropa sucia.
Yo – si ma,me di cuenta….
Me quedepensando dos segundos…
Yo – pero noes que me di cuenta porque lo quise volver a hacer!!! Es que veía que siempreque terminabas de bañarte ponías el lavarropas.
Mamá – ahh…pensaba que seguias buscando mis bombachas!!! La que tiene que pedir perdón soyyo por entrar en tu habitación, y ahora me gustaría saber si de verdadexperimentaste algo muy lindo… hablando mal y pronto, acabaste mejor? Quiero saberque sentiste.
Me dejohelado con la pregunta, no pensé que fuera a salir con eso!
Yo – bueno,la verdad que si, acabe como nunca lo había hecho.
Dije eso yme di cuenta que no tenia que haberlo dicho… me arrepentí y me quería desaparecer.
Mamá – en serio?No te puedo creer. Ya te digo, me parece raro. Y no se si esta bien lo que tevoy a decir, pero si hacia sentir bien, hacelo, no quiero que estes mal. Ya demasiadoque te traje a miles de kilómetros de tu familia y amigos. Ahora mejor vamos adormir que ya es muy tarde.
Se levanto,fue a su habitación, después fue al baño y volvió a su habitación, saludándome desdelejos.
Mamá –hasta mañana hijo, que descanses.
Cuando fuial baño había una tanga de ella arriba del todo del cesto de la ropa sucia,bien extendida, como que había sido puesta a propósito para que la vea y me lalleve…
El dia deescuela no pudo ir peor… tenia la cabeza en cualquier lado, estaba nervioso,solo pensaba en que le iba a decir cuando me pida de hablar. Cuando llego lahora de salir, me fui a casa caminando mas lento que de costumbre, de a ratospensaba en no ir a mi casa, pero adonde iba a ir? Me aliviaba un poco el hechode pensar que ella no llegaba hasta mas tarde. Millones de cosas se me cruzabanen mi cabeza, y de repente estaba parado frente a la entrada al departamento,de tan nervioso y tantas cosas que estaba pensando no me di cuenta de como llegue.
No teniahambre, asi que pase de largo el almuerzo, sentía que las tripas eran piedras,me tire a mirar televisión y navegar en el celu, charle con unos amigos, perosiempre pensando en la charla que tendría… pasaron las horas y llego mi mamá…me quede otra vez sin palabras, solo pude decir
Yo – Hola má..todo bien?
Mamá – Si,todo bien. A vos como te fue? Pone el agua asi tomamos unos mates y charlamosun poco.
Yo – Si má.
Estabahecho un boludo, no podía decir mas nada, no me salían las palabras, y que mediga que íbamos a charlar me hizo poner mas nervioso, ella se fue al baño y acambiarse y yo me fui a la cocina, en unos minutos tenia todo listo, lleve alliving y me sente el sillón, comencé a cebar un mate y apareció ella, se sentofrente a mi y de una fue al asunto directamente, creo que quizás también ledaba nervios y para no dar muchas vueltas tiro todo enseguida.
Mamá –primero quiero pedirte perdón por haber entrado a tu habitación asi de golpe,ya no sos un nene y mereces tener tu privacidad. Con tu edad ya sabes que esoque estabas haciendo es perfectamente normal para los varones, no sos elprimero ni el ultimo que lo hace, y la edad tampoco es un impedimento. Además tambiénentiendo que estamos lejos de casa, en otro país, otro idioma, otra cultura, ypor ahí se te hace difícil conocer chicas de tu edad, y tampoco me gustaría quetengas relaciones con alguna chica de aca y que por un descuido termines conalguna enfermedad o con un embarazo.
Al escucharestas palabras me sentí un poco aliviado, seguía cebando mates y todavía nosabia que decir.
Mamá – Lo únicoque voy a decirte es que vi algo que mellamó la atención, y estaba sospechando que algo pasaba… tenias una bombachamía mientras lo hacias.
Ahí se meparo el mundo, creo que me puse palido… sentía que el corazón me latia a milpor hora y que se me iba a salir, creo que jamas estuve tan nervioso en mivida.
Mamá – no seque estaras pensando, pero me gustaría que me lo cuentes.
Yo – es que….Que… que…
Y no supeque decir, deje todo y me fui a mi habitación, cerre la puerta y me quede en lacama.
Ella vinoal minuto a mi habitación, entro, se sento a mi lado y me dijo
Mamá – no esque lo haya tomado mal, tampoco quiero retarte y mucho menos que pienses que meenoje con vos por lo que hiciste, solo dije que me llamo la atención y quisierasaber que te llevo a hacer eso.
Yo – perdónma, no se que pensaba… solo fue una idiotez que se me cruzo por la cabeza y lohice.
Mamá – no estesafligido, no me enojo con vos. Tampoco es la primera vez que lo hacias, verdad?
En esemomento no sabia si confesar, tenia miedo que si lo hacia se iba a enojar, peroalgo adentro me decía que ya estaba, me descubrió, y si le decía que no iba apensar que si lo había miles de veces
Yo – no, nofue la primera vez, fueron varias, no se. Fue una idiotez, y ahora me sientomuy mal.
Mamá – estabien hijo, no te pongas asi, ya esta, te dije que no me enoje con vos, yentiendo que no tenes mucho contacto con mujeres, por eso no puedo enojarme,esta bien? Ya esta, ya paso, es perfectamente normal que sientas deseos. Ahora yame siento mejor de que lo hablamos, espero que vos también. Y me sientoculpable de haber interrumpido en la intimidad de tu cuarto.
Yo – en seriono estas enojada?
Mamá – no,para nada hijo, solo que me llamo la atención que tenias mi bombacha, pero yaesta, no te sientas mal por eso.
Yo – pensé quete ibas a enojar y mucho… por eso estaba nervioso y me levante del sillón y mevine al cuarto.
Mamá –bueno, ya esta, si queres volver a seguir tomando mates y charlamos un poco decomo están tus cosas, me encantaría, y si en algún momento me queres contar lode la bombacha, queda en vos.
Me levante,fuimos al living, y charlamos bastante de las cosas de la vida, pero no me salíacontarle que me exitaba usar sus bombachas para pajearme. Esos días posteriores,debe haber sido de los nervios de la situación, que no sentía calentura. No teniaganas de pajearme. No se si habran pasado 4 o 5 dias, hasta que me empezó asubir otra vez la libido, nadie puede luchar contra eso… me levante una mañanamuy caliente y con la pija dura, ese dia estuve todo el dia pensando en sexo,en pornografía, en hacerme la paja. Y también pensé en buscar una bombacha demamá.
Llego lanoche, cenamos y nos pusimos a ver una peli, en un momento empezaron unasescenas de sexo, no explicito pero se veian algunas imágenes de la mujer entetas, y como se besaban y cogían, solo de lejos como cualquier película noporno. En ese momento ella me miro fijamente como queriendo decir algo, como sicon esto yo me iba a ir a pajear a mi cuarto… la mire y me calente…
Mamá – que momentoincomodo, creo que voy a cambiar de canal, no es por nada, pero por lo queestuvimos viviendo hace poco, siento que tendríamos que ver otra cosa.
Yo – si…bastante incomodo para los dos.
Pero nocambio de canal, y a la vez me sentía tan caliente que casi no pensaba…
Yo – quieropedirte perdón de nuevo má, por lo que hice el otro dia, se que estuve mal,pero bueno, estaba muy….
Y me quedesin palabras.
Mamá – estabien, no pasa nada… y muy caliente es lo que estabas, decilo, sin miedo.
Yo – si…muy caliente. Por eso hice lo que hice.
Mamá – lo queestabas haciendo o lo de la bombacha?
Yo – las doscosas… y bueno, si queres saber…
La calenturame seguía ganando y decidi a contarle todo
Mamá – me gustaría,pero no quiero que te pongas mal
Yo – bueno má,lo primero es que si, se que no estuve para nada bien, y de nuevo te pidodisculpas. Pero sos la única mujer con la que estoy compartiendo el tiempo, ylo que hice fue porque sentir el olor de tu ropa interior me hizo experimentaralgo raro, muy lindo, nunca me había pasado.
Mamá –guau. Nunca me hubiera imaginado que podía pasar eso, pensaba que era algoasqueroso lo que hacias, oler una bombacha, no me deja de parecer raro…
Yo – si,por eso, perdón… cuando me descubriste me sentí muy mal, y bueno, prometo novolverlo a hacer.
Mamá – no sesi te diste cuenta, pero estoy teniendo cuidado de no dejar mas ropa interioren el cesto de ropa sucia.
Yo – si ma,me di cuenta….
Me quedepensando dos segundos…
Yo – pero noes que me di cuenta porque lo quise volver a hacer!!! Es que veía que siempreque terminabas de bañarte ponías el lavarropas.
Mamá – ahh…pensaba que seguias buscando mis bombachas!!! La que tiene que pedir perdón soyyo por entrar en tu habitación, y ahora me gustaría saber si de verdadexperimentaste algo muy lindo… hablando mal y pronto, acabaste mejor? Quiero saberque sentiste.
Me dejohelado con la pregunta, no pensé que fuera a salir con eso!
Yo – bueno,la verdad que si, acabe como nunca lo había hecho.
Dije eso yme di cuenta que no tenia que haberlo dicho… me arrepentí y me quería desaparecer.
Mamá – en serio?No te puedo creer. Ya te digo, me parece raro. Y no se si esta bien lo que tevoy a decir, pero si hacia sentir bien, hacelo, no quiero que estes mal. Ya demasiadoque te traje a miles de kilómetros de tu familia y amigos. Ahora mejor vamos adormir que ya es muy tarde.
Se levanto,fue a su habitación, después fue al baño y volvió a su habitación, saludándome desdelejos.
Mamá –hasta mañana hijo, que descanses.
Cuando fuial baño había una tanga de ella arriba del todo del cesto de la ropa sucia,bien extendida, como que había sido puesta a propósito para que la vea y me lalleve…
6 comentarios - Viviendo solos con mamá, parte 3